Tras el anuncio de hace apenas unos días, en el que el gobierno federal daba a conocer que, a partir de 2019, el salario mínimo tendría un alza de $14.32 pesos al día, muchas empresas comenzaron a temer también un incremento en la inflación. Pero, según datos revelados por BBVA Research, esto no será así.
Esto se da debido a que el nivel del salario sigue siendo bajo, y al considerar aumentos progresivos para los siguientes años, no tendrían impacto en la inflación. La participación de los trabajadores que ganan menos es tan baja que dicho incremento no representa un impacto real a la economía nacional y es por eso que no tendría efectos negativos para la nación.
Por el contrario, este incremento corrige un deterioro de mucho tiempo en el poder adquisitivo de los trabajadores que menos ganan.
En su análisis, la investigadora financiera reveló que la forma de distribución salarial se ha modificado desde los años 90, pero que, con este incremento recientemente oficializado, se ha recuperado el nivel que tenía previo a la crisis del 94.
También, se informó que la proporción actual de empleados que perciben el equivalente a un salario mínimo ha llegado al 16.2%, mientras que los salarios más altos, solo los percibe el 4.5% de los trabajadores.
Con información de El Economista