Desde el inicio de 2020, la industria de la moda ha atendido a nuevas necesidades del mercado y contexto social actual. En un inicio, algunas marcas como Mango o H&M apostaron por reducir su huella ecológica en el mundo, luego otras más se pronunciaron a favor de la eliminación del «fast fashion». Tras la llegada de la contingencia sanitaria y el cierre forzoso de estos establecimientos, en pro de la salud colectiva, se cambiaron los métodos de consumo, poniendo especial interés en el e-commerce. A continuación enlistamos las estrategias que esta industria adoptó para mantenerse vigente.
Incorporación al e-commerce
Aun cuando se puede decir que la totalidad de marcas con gran impacto tienen sitios en línea desde donde se pueden adquirir los productos, se necesitó empatar la «importancia» de la compra física con la virtual, incluso adaptar los modelos de ventas para satisfacer las necesidades de los clientes y la demanda de productos. Tomando como ejemplo a México, según Jacob Rivas, e-commerce consultant, el contexto actual aceleró una era que ya se avizoraba.
“Hasta el 2019, las compras en línea se limitaban a vuelos, hospedajes, comida por aplicaciones y aparatos electrónicos. Con el anuncio de la fase dos de la contingencia hubo un aumento del 30% en ventas en sitios de supermercado en línea; el deporte invadió las plataformas con incremento de compras del 14% y la ropa con un 19%. Los usuarios queremos distraernos en casa y estar seguros al momento de adquirir artículos y evitar aglomeraciones”, comentó.
Siguiendo por la misma línea, el sitio de noticias Merca2.0, hace un seguimiento de marcas con amplia ocupación mundial para explicar cómo cambiaron sus modos de ventas hasta asirse de una presencia omnicanal “ya sea reforzando canales, mejorando experiencia de compra o lanzando nuevas tiendas online, apoyándose de los recursos que aún se pueden emplear de las tiendas físicas”.
Es decir que la clave para que la industria se mantenga en pie a pesar de los retos del presente, está completamente relacionada a su capacidad de incorporar escenarios alternos al físico, sin que esto signifique descartar los métodos tradicionales. Con la transformación de los modos de consumo, las tiendas ahora deberán competir con marcas pequeñas, lo que significa nuevas interacciones de mercado, con retos publicitarios nuevos.
Tiendas físicas post cuarentena
Los protocolos de higiene y sanidad deben adaptarse a las necesidades del sitio en específico, sin embargo no distan mucho entre sí, sin importar la zona geográfica. En todas partes inician con un filtro a la entrada y convergen en mantener las piezas de ropa y accesorios correctamente sanitizados a la llegada del cliente. Además de asegurar la salud de los asistentes, las cadenas comerciales se han esforzado en resguardar a sus colaboradores.
En un artículo realizado por esta medio a inicios de junio, explicamos las medidas sanitarias que Liverpool incorporó en sus tiendas. A continuación retomamos las que generalmente son utilizadas por demás marcas en todo el país e incluso fuera de él.
- Limpieza de artículos en exhibición
- Todos los espacios serán sanitizados diariamente
- Colocación de filtros a la entrad y gel antibacterial en toda la tienda
- Señalización de sana distancia
- Cada vez que se usen los probadores la ropa será retirada para su debida sanitización antes de que se retorne a exhibición, además que el área utilizada será desinfectada
- Todos los colaboradores estarán protegidos con cubrebocas y/o caretas
- Las puertas estarán divididas en entradas y salidas para controlar el flujo de clientes
- También está disponible el servicio Click & Collect (la compra se puede hacer en línea y recoger la mercancía a bordo del automóvil)
- Seguirá disponible la venta en línea a través de sus plataformas