Según los datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la esperanza de vida al nacer en México para el año 2023 es de 75.3 años (72.3 para hombres y 78.6 para mujeres). Este dato representa un incremento en comparación con la medición más antigua registrada por este organismo en 2010, que indicaba una esperanza de vida de 74.3 años (71.4 para hombres y 77.2 para mujeres).
En total, quince entidades exhiben una esperanza de vida superior al promedio nacional. Los cinco primeros lugares los ocupan Nuevo León (77.6 años), Baja California Sur (77), Aguascalientes (76.7), Sonora (76.6) y la Ciudad de México (76.6). Completan la lista Baja California, Coahuila, Colima, Chihuahua, Jalisco, Nayarit, Querétaro, Quintano Roo, Sinaloa y Tamaulipas.
Contrariamente, 16 estados presentan una esperanza de vida por debajo de la media nacional. Las entidades con la esperanza de vida más baja en México son Chiapas (72.8 años), Guerrero (72.9 años) y Oaxaca (73.1).
A nivel nacional, estos estados son también los que muestran el mayor porcentaje de su población en situación de pobreza y pobreza extrema. Las tres entidades también presentan el mayor rezago a nivel nacional en acceso a servicios de salud, según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL).
El listado también incluye a Veracruz, Tabasco, Campeche, Guanajuato, Hidalgo, Estado de México, Michoacán, Morelos, Puebla, San Luis Potosí, Tlaxcala, Yucatán y Zacatecas. Durango es el único estado que refleja una esperanza de vida igual al promedio nacional (75.3 años).
En los últimos trece años, la esperanza de vida en México ha experimentado fluctuaciones notables, reflejando diversos eventos y desafíos. Desde 2010 hasta 2019, se observó una tendencia general al alza, alcanzando su punto más alto en 2013 con 75.2 años. Sin embargo, los años 2020 y 2021 marcaron un descenso abrupto a 68.9 y 68.8 años, respectivamente, atribuido principalmente al impacto devastador de la pandemia de COVID-19.
No obstante, un dato alentador es que, en 2022, la esperanza de vida se sitúo en 75.2 años, y este repunte se mantuvo en 2023 con 75.3 años.
A pesar de la recuperación observada en México durante el último año, con una esperanza de vida al nacer de 75.3 años, esta cifra es casi cinco años menor al promedio de naciones que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
¿Qué desafíos y oportunidades existen?
Según una publicación de México, ¿cómo vamos? con datos del CONEVAL, en 2022 se reflejaba un incremento en el porcentaje de la población con carencia por acceso a los servicios de salud, con un incremento de 23.5 puntos porcentuales entre 2016 y 2022.
El informe señala que el incremento en la falta de acceso a los servicios de salud se asocia con una marcada disminución en la población afiliada a instituciones públicas, independientemente de su situación laboral. Indica que, en el 2018, las entidades encargadas de proporcionar estos servicios de salud eran el Seguro Popular y el IMSS-Prospera, logrando una cobertura del 42.4%.
Sin embargo, para 2022, los proveedores de estos servicios eran el INSABI e IMSS-Bienestar, con una cobertura del 13.5%, una disminución de 28.9 puntos porcentuales. El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) puntualizó que esta caída en la cobertura en los servicios de salud es mucho más pronunciada en los hogares de menores ingresos en el país.
El informe «Panorama de la Salud: América Latina y el Caribe 2023» de la OCDE también revela indicadores no tan alentadores para el país. Algunos de ellos son:
- El alcance de los servicios básicos de salud para la población mexicana se situó en un 72.4%, cifra inferior al promedio registrado por todos los países pertenecientes a la OCDE (el cual alcanzó el 97.9%).
- En cuanto a la inversión en salud con relación al Producto Interno Bruto (PIB), el promedio de la OCDE se sitúa en 9.2%, mientras en México es de un modesto 5.5%.
- La inversión per cápita en salud en México asciende a mil 811 dólares, una cantidad inferior al promedio de los países de la OCDE, que alcanza los cuatro mil 986 dólares per cápita.
- México registra la presencia de 2.5 médicos y 2.9 enfermeras por cada mil habitantes, en contraposición al promedio de 3.7 y 9.2, respectivamente, en países de la organización. Asimismo, se dispone de una cama médica por cada mil habitantes, cifra que contrasta con el promedio de 4.3 en naciones pertenecientes a la organización.
- Regionalmente, México presenta la segunda tasa de mortalidad infantil más alta, alcanzando 13.8 por cada mil nacidos vivos. Esto contrasta significativamente con la media de la OCDE, que se sitúa en cuatro muertes por cada mil nacidos vivos.
- Con una tasa de 665 defunciones por cada 100 mil habitantes, México encabeza a todos los países de la OCDE en la tasa de mortalidad evitable (prevenible y tratable), definida como aquellas causas de muerte entre personas menores de 75 años que pueden evitarse principalmente a través de intervenciones eficaces de salud pública y prevención primaria. El promedio del organismo internacional se ubica en 237 decesos.
- En México, el 36% de los adultos presenta obesidad, por encima del promedio de la OCDE del 26%. Sin embargo, muestra un bajo consumo de tabaco (8.6% respecto al 16% del promedio) y alcohol (de 5.1% vs 8.6%).
En declaraciones recogidas por Expansión, Frederico Guanais, director adjunto de la División de Salud de la OCDE, mencionó que la mayoría de las defunciones en América Latina no obedecen a falta de acceso, sino porque la gente acude a los servicios de salud y recibe una atención de mala calidad.