La amnesia de las madres o momnesia es una afectación en la memoria y la atención que presentan algunas mujeres durante y después del embarazo. También es conocida con sus términos en inglés: baby brain o mommy brain. El doctor Rodolfo Callejas, director de NeuroSleepKlinik, nos cuenta sobre este padecimiento, por qué sucede y qué se puede hacer para combatirlo.
En cuanto a la literatura científica que patenta la existencia y prevalencia de esta condición, Callejas asegura que la amnesia materna se presenta hasta en el 80% de las mujeres que atraviesan o atravesaron un embarazo; además, los síntomas pueden prevalecer hasta dos años después del parto.
“El número de mamás que lo viven puede ser tan alto como el 80%. Es una métrica bastante alta, por lo menos ya reportada en la literatura[…] En 2017, un estudio de seguimiento demostró que este cambio puede estar hasta por dos años”, comparte.
Según Rodolfo Callejas, la pérdida de memoria y atención se debe a cambios en la estructura cerebral similares a los que acontecen durante la maduración del cerebro adolescente al adulto.
“Se han hecho estudios de resonancia magnética funcional y este cambio que se ve tanto en la estructura como en la función es muy parecido, sino casi idéntico, al cambio que se ve en el cerebro cuando cambia el adolescente al cerebro adulto […] Este cambio fino responde a tener que estar más al pendiente de la nueva vida”, asegura Callejas.
Falta de atención, dificultad en la concentración o presencia continua de olvidos son algunos síntomas que alertan sobre esta condición. La forma de tratarla, además de buenos hábitos de alimentación, sueño y actividad física, consiste en la aplicación del tratamiento de neuromodulación.
“Las primeras formas de intervenir son las que utilizamos en prevención de cualquier otra enfermedad: alimentación, ejercicio y buen dormir. Después tendríamos otra medida de tratamiento no farmacológico: neuromodulación acompañada de neuropsicología para mejorar atención y memoria”, señala.
El tratamiento de neuromodulación es ofrecido por NeuroSleepKlinik y consta de doce sesiones en días alternos (lunes, miércoles y viernes, o martes, jueves y sábados). Su eficacia se percibe a partir de la sexta sesión y se considera positiva cuando hay una mejoría de más del 65% según las escalas que miden la atención y la memoria.
“Hemos logrado tasas del 65% con las pacientes que hemos atendido, porque esa es la gran ventaja: dar ambas intervenciones de forma simultánea es lo que nos permite la estimulación eléctrica. Mientras estás recibiendo la neuromodulación, se participa de forma activa con la neuropsicóloga, entonces terminan siendo dos sesiones de ambas, neuromodulación y estimulación cognitiva”, concluye.