El Hospital Cardiológica de Aguascalientes será el segundo lugar del país que cuente con tecnología de punta para tratar enfermedades cardiovasculares mediante un tratamiento de choques eléctricos.
El nuevo sistema se llama Cardiospec y es utilizado en el Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez (INCICH), en el Distrito Federal. La tecnología viene de Alemania y está autorizada por la COFEPRIS, la FDA de Estados Unidos y la Unión Europea.
Biomédica, la empresa fabricante, entregó el aparato en comodato para que sea utilizado en el Hospital Cardiológica por tiempo indefinido, anunció Guillermo Llamas Esperón, jefe de Enseñanza y del Centro de Investigación del Hospital. Ellos instalaron el equipo, que en el mercado normal tiene un costo aproximado de 10 millones de pesos.
El tratamiento dura nueve semanas. Cada sesión es de 30 minutos máximo y no causa dolor o malestares. El 85 por ciento de los pacientes que se tratan con esta técnica presenta una mejoría, el 15 por ciento restante no responde, pero tampoco empeora.
Carlos Medina Sánchez, jefe del Departamento de Urgencias y Unidad Coronaria del INCICH, comentó que en su instituto se han tratado a 43 pacientes con este método y la mayoría ha mejorado.
Los choques eléctricos del Cardiospec producen una angiogénesis, es decir, la formación de nuevos vasos sanguíneos a partir de los que ya existen. Este proceso es similar al que generan las células madre en los tejidos dañados.
La terapia total tiene un costo de 45,000 pesos que puede parecer caro, aunque no lo es tanto si se compara con los 300,000 pesos de una cirugía a corazón abierto, menciona el doctor Llamas Esperón.
Este tratamiento puede ser preventivo o para pacientes que por lo grave de su enfermedad no puedan acceder a una cirugía. La misma tecnología se ha utilizado en áreas como urología y ortopedia, y hasta en problemas de disfunción eréctil.
En Aguascalientes, las enfermedades del corazón, específicamente las de arterias coronarias, ocupan el primer lugar en mortalidad.
Casi la mitad de las personas que tienen un infarto mueren antes de llegar a un hospital. Si sobreviven, un gran porcentaje sufrirá daños e insuficiencias cardiacas. Debido a la dificultad y el costo de un trasplante se han buscado alternativas para dar tratamiento a estas personas. El tratamiento mediante choques eléctricos es una de ellas.
Medina Sánchez recordó la necesidad de invertir en la prevención de enfermedades del corazón, dar más información a la ciudadanía mediante campañas que sean difundidas con la misma intensidad que las de cáncer de mama y VIH, por ejemplo.