Por Michael Novak, CEO y fundador de Novak Innovation y fundador de Infinite Institute
El 2023 ha sido el año de la Inteligencia Artificial (IA) y ha despertado tanto entusiasmo como preocupación en torno al impacto que tendrá en nuestro trabajo y en las habilidades que necesitaremos para nuestro futuro. Es natural que estemos preocupados, pero lo más probable es que la IA venga a revalorizar nuestras cualidades humanas.
A lo largo de la historia, las máquinas nos han liberado de tareas mecánicas para permitirnos enfocar cada vez más en tareas humanas. Esta tecnología no es la excepción, ya que la IA utiliza algoritmos para analizar grandes cantidades de datos, pero su utilidad depende de cómo incorporamos ese análisis usando nuestra inteligencia humana.
En el evento Content Marketing World, se organizó una competencia para que un equipo de creativos compitiera contra uno asistido por IA en la creación de una campaña de marketing. La campaña creada por el equipo de IA ganó con el 68% de los votos en una votación comunitaria. ¿Por qué ganó ese equipo?
Según Arlene Wszalek, vicepresidenta de Innovación en Allied Marketing, con el poder de la IA, podemos desarrollar estrategias más sólidas, ya que permite analizar rápidamente datos y tendencias del mercado. La IA mejora la productividad, pero necesita la inteligencia y la creatividad humana para transformar esa información en soluciones.
Por otro lado, un informe de Goldman Sachs en 2023 menciona que la IA podría automatizar una cuarta parte de la fuerza laboral global —incluyendo puestos de servicio y alta dirección y, especialmente tareas como el procesamiento de pedidos y la creación de reportes de resultados—; sin embargo, otros aspectos que requieren habilidades sociales y estratégicas se volverán más importantes.
La capacidad de la IA es tan valiosa como la inteligencia humana que la utiliza. Su potencial se desbloquea cuando combinamos sus fortalezas mecánicas con nuestras habilidades únicas. Su capacidad para optimizar operaciones nos liberará de tareas mundanas, permitiéndonos enfocar nuestra energía en la creatividad, la resolución de problemas y en las relaciones humanas.