Hasta que no haya una vacuna contra el COVID-19, la manera en que viajamos no será la misma. Por ello, toda la industria turística está trabajando a marchas forzadas para evitar más pérdidas (hasta junio se habían eliminado más de 100 millones de empleos) y adaptarse a la nueva realidad. Aquí mostramos algunas tendencias que podríamos ver en los próximos meses para garantizar un viaje más seguro…
El fin del contacto
Intercambiar documentos de viaje como boletos de avión o pasaportes puede ser una trampa mortal para contagiarse. Por ello, analistas del Foro Económico Mundial consideran que se apostará por el uso de la identidad digital y tecnologías biométricas para restablecer la confianza de los viajeros. No obstante, advierten que sólo será un éxito si los usuarios sienten que su información está blindada y protegida.
¿Adiós al turismo masivo?
La sugerencia de las autoridades sanitarias de evitar lugares masivos podría impactar a lugares turísticos que reciben a millones de visitantes cada año. Por ejemplo, la ciudad de Venecia, que tuvo que cancelar su famoso carnaval, dijo estar reconsiderando virar hacia “un turismo más inteligente”, alejado del flujo frenético de visitantes que recibe cada año (30 millones aproximadamente). Por lo pronto, en París, la Torre Eiffel abrió sus puertas pero con restricciones en su aforo.
Destinos naturales cobran relevancia
Al ser los lugares cerrados y concurridos los favoritos de COVID-19 para propagarse, los destinos naturales ganarán adeptos al permitir seguir de manera más fácil las normas de distanciamiento social. Parques nacionales como Yellowstone en EE.UU, o el Tayrona, en Cartagena, Colombia, pueden ser buenas alternativas.
Turismo doméstico, favorecido
“El nuevo mundo de los viajes verá un auge en el turismo doméstico: muchos viajeros usarán camionetas o vehículos recreativos porque les brinda mayor autonomía trasladarse de esa manera”, refiere Rolf Potts en Foreign Policy, un reconocido especialista en Turismo. México apostará por reactivar este segmento, pues el turismo nacional representa un consumo de 124 mil millones de dólares anuales, 83% de la derrama generada por el turismo.
¿Boletos de avión más caros?
Sandeep Goyal, asesor del sector turístico, hotelero y aeronáutico, vaticina que la eventual orden de los gobiernos a las aerolíneas de dejar un asiento libre entre pasajeros para garantizar la sana distancia puede incrementar el costo de un boleto de avión. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo ha desestimado esa solución y ha advertido que una orden como la anterior podría encarecer entre 43 y 54% el costo del boleto dependiendo de la región.
¿Hoteles de lujo más accesibles?
Para hacer frente a la crisis económica, los hoteles de lujo podrían reducir drásticamente sus tarifas. Con más cancelaciones que reservaciones, la hospedería en la India ha rebajado hasta 20% el precio de sus costos, según el Economic Times de la India.
