Uno de los retos más complejos para la medicina actual es el cáncer. Esta enfermedad se caracteriza por la multiplicación y diseminación sin control de células anómalas que han perdido la autorregulación de su ciclo de vida, lo cual puede ocurrir en cualquier célula del organismo.
A nivel mundial, cifras de la GLOBOCAN (Global Cancer Observatory) indican que, hasta 2020, hubo un total de 19 millones 292 mil 789 nuevos casos de cáncer en todo el mundo. En México, la cifra alcanzó los 195 mil nuevos casos, de todas las edades en todos los tipos de cáncer.
Las ciencias médicas y sus aliados, en sinergia con los avances tecnológicos, se mantienen a la vanguardia en esta batalla con el objetivo de curar, preservar la calidad de vida o paliar los síntomas de los enfermos que lo padecen.
Con el objetivo de proveer de soluciones avanzadas de vanguardia del más alto nivel de calidad, Roberto Antonio Rodríguez, cirujano oncólogo en el Hospital Ángeles San Luis Potosí, realiza junto a su equipo una técnica que ayuda a preservar la vida.
Formación que cumple las expectativas
Roberto Antonio Rodríguez es médico cirujano egresado de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP). Cuenta con una subespecialidad en Cirugía Oncológica y una alta especialidad en Cirugía oncológica de cabeza y cuello, por el Instituto Nacional de Cancerología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Además, realizó un Fellowship de dos años, enfocado en cirugía y oncología de cabeza y cuello avalado por la IFHNOS.
Dentro de su trayectoria se encuentra su participación como socio fundador de la Sociedad de Oncología Quirúrgica de México, donde actualmente se desempeña como tesorero.
Ha colaborado como presidente del Primer Congreso de la Sociedad de Oncología Quirúrgica de México y como representante de la Sociedad de Oncología Quirúrgica de México ante la International Federation of Head and Neck Oncologic Societies (IFHNOS).
Desde su formación destacó ocupando la jefatura de médicos residentes de cirugía general; y en el Instituto Nacional de Cancerología fungió como jefe de residentes del instituto durante el tercer año de la subespecialidad.
Actualmente, a la par de su encomienda en el Hospital Ángeles, funge como cirujano en el Hospital Central “Dr. Ignacio Morones Prieto” y como profesor titular del curso de cirugía de pregrado de Medicina en cirugía de la UASLP.
Amplio conocimiento en acción
Su formación, arraigada desde su vocación personal, le permite intervenir en todo tipo de cáncer, excepto en los del sistema nervioso central, sin embargo, son siete las áreas principales de la oncología quirúrgica en las que tiene acción:
- Tumores de mama
- Tumores ginecológicos
- Tumores de cabeza y cuello
- Del tubo digestivo, hígado, páncreas y vías biliares
- Tumores genitourinarios
- Tumores de la piel y partes blandas
- Tórax y mediastino
Por su formación en oncología quirúrgica se especializa en operaciones de alta complejidad en todas las áreas antes mencionadas.
Para ello, es necesario un equipo multidisciplinario eficiente, que involucre los conocimientos en otras disciplinas, como la anestesiología, oncología médica , rehabilitación y nutrición, así como la infraestructura y tecnología adecuada, dependiendo el caso.
HIPEC: Soluciones complejas para mejorar la calidad de vida
Roberto Antonio Rodríguez, de la mano de la cobertura integral del Hospital Ángeles San Luis Potosí, acerca a sus pacientes a la técnica de intervención HIPEC, que se aplica para el tratamiento de la carcinomatosis peritoneal (células cancerosas en el área abdominal).
“En definición, es la aplicación de quimioterapia a altas concentraciones con temperatura elevada como segundo paso de un procedimiento llamado cirugía citorreductora, el cual tiene como objetivo, extirpar todos los implantes de tumor visibles en la cubierta del abdomen llamada peritoneo”, subraya.
El origen de este tipo de intervención, señala, tiene su registro en la década de 1980, en Italia, donde anteriormente, no existía manera de tratar esta enfermedad.
“El peritoneo es una cubierta interna en el abdomen, prácticamente es como la piel, la cual es retirada, sin embargo, hay gran parte de peritoneo que no puede quitarse debido a que cubre los intestinos, dejar enfermedad en esa área disminuye la efectividad de la intervención quirúrgica, por eso se investigó y desarrolló la aplicación de quimioterapia a altas concentraciones durante la cirugía”, detalla.
Expertos en la materia desarrollaron este tipo de intervención, que utiliza la solución de quimioterapia en altas dosis y a temperaturas elevadas, con la premisa de dejar la menor cantidad de tumor.
“En este procedimiento se utiliza una solución de quimioterapia en calor a 42°C, que es administrada a través de una máquina de perfusión extracorpórea directamente en el abdomen”, explica.
Es decir, una vez retirada la enfermedad del peritoneo, la bomba calienta la solución y se administra y circula por el abdomen en un periodo de 60 a 90 minutos.
Su grado de complejidad es tal que la intervención dura entre las ocho y doce horas, con periodos de recuperación en hospital de entre los diez y 21 días, promedio
Una selección hábil de los candidatos
Roberto Antonio Rodríguez señala que la HIPEC está diseñada para las y los pacientes con carcinomatosis peritoneal, siendo aquellos con cáncer de ovarios y de colón los más beneficiados. Para la selección se realiza una evaluación con relación al tipo de cáncer y estado general del paciente.
De igual forma, se toma en cuenta si la o el candidato tuvo previo tratamiento con quimioterapia por vía intravenosa, si se trata de tumores residuales, o bien, si presentan una recaída con la aparición de nuevos tumores.
Cabe destacar que en esta operación, de acuerdo al doctor Roberto Antonio Rodríguez, cerca del 30% de las personas intervenidas presentan alguna complicación menor o mayor.
En contraste, los beneficios serán notorios, pues permite alargar el promedio de supervivencia y mejorar la calidad de vida de quien se interviene, pues permite tratar un padecimiento que antes se consideraba terminal.
La infraestructura importa
Este procedimiento en San Luis Potosí y algunos estados vecinos se realiza únicamente en el Hospital Ángeles San Luis Potosí, donde aunado al equipo tecnológico, se encuentra el grupo de expertos, que, en conjunto, realiza la intervención bajo la dirección de Roberto Antonio Rodríguez.
Desde hace seis años a la fecha, aquí se han llevado a cabo un total de 14 cirugías bajo el método HIPEC.
“El éxito de una cirugía se busca, no es una cosa al azar, tienes que controlar todas las variables para tener éxito; el Grupo Ángeles nos brinda al equipo todos los requerimientos necesarios, siempre están presentes”, señala.
En resumen, Roberto Antonio Rodriguez destaca que esta iniciativa tiene un impacto regional, no obstante, poca gente lo conoce. Menciona que cualquier paciente en México que lo requiera, puede buscar la asesoría o acudir a una valoración.
Finalmente, rescata que tras varios años de ejercicio en este ámbito, lo más satisfactorio es poder cambiarle la vida a la gente e impactar de una manera u otra en sus pacientes y familiares.