Como una herramienta revolucionaria, la inteligencia artificial (IA) promete marcar un antes y un después en el ámbito empresarial.
A consideración de Luis Gabriel Bucio, responsable de la innovación y estrategia de Tecnología en Continental Automotive en México, la IA no es solo una tendencia pasajera, sino una realidad que redefine la forma en que las empresas operan y compiten.
Para el ejecutivo, la promesa de la IA va más allá de la simple automatización; se trata de una liberación del potencial humano.
Su capacidad para procesar grandes cantidades de datos y generar insights valiosos puede liberar a los empleados de tareas rutinarias, permitiéndoles dedicarse a actividades que requieren un mayor grado de creatividad y habilidades interpersonales.
Esta liberación del potencial humano se traduce en una mayor productividad y, a su vez, en un crecimiento sostenido para las organizaciones.
Sin embargo, la adopción de la IA no es un camino fácil. Las empresas se enfrentan a retos como la inversión en tecnología avanzada, la capacitación de sus equipos y la navegación por un panorama ético y regulatorio aún en desarrollo.
Transformar en vez de eliminar
La preocupación de que la IA pueda reemplazar puestos de trabajo es un temor común, pero Bucio enfatiza que la tecnología está destinada a transformar roles, no a eliminarlos.
Para que la IA sea ampliamente aceptada y adoptada en las organizaciones, es crucial cambiar la percepción de que se trata de una amenaza laboral, abundó Bucio.
Por esta razón los líderes empresariales juegan un papel fundamental en este proceso al impulsar la adopción de la IA y facilitar la transición hacia un nuevo modelo de trabajo.
“Debemos asegurarnos de facilitar las capacitaciones, demostrando el valor, los beneficios, así como el uso y acceso a la tecnología dentro de las empresas”, compartió.
¿Cómo aprovechar ese potencial en la competitividad de las empresas?
Para mantenerse competitivas, las empresas deben considerar varios aspectos clave en la implementación de la IA. Luis Gabriel Bucio enlista los siguientes:
- Invertir en talento y capacitación
- Desarrollar una estrategia específica para el uso de IA
- Proyectos piloto
- Colaboraciones con la academia o startups
Del mismo modo, dijo que es crucial no descuidar la ética y mantenerse al día con las tendencias tecnológicas.
Aunque muchas empresas están en las etapas iniciales de adopción de la IA con proyectos piloto, mencionó que las pequeñas empresas aún enfrentan retos para dar los primeros pasos en esta dirección.
No obstante, la IA se encuentra en una fase de desarrollo temprano, comparable con un niño en entrenamiento. Con el tiempo, se espera que esta tecnología madure y ofrezca resultados aún más impresionantes.
Oportunidades en el horizonte, según Continental
Al concebir que los datos son el combustible que alimenta la IA, su recolección y análisis son oportunidades que las empresas pueden aprovechar para impulsar el crecimiento y la innovación.
Para Bucio, la falta de capacidades y conocimientos especializados en IA representa uno de los principales obstáculos para su implementación exitosa. De ahí que destaca que la colaboración con instituciones académicas es fundamental para generar y ampliar este conocimiento.
Para mejorar la comunicación y colaboración entre equipos directivos y técnicos en relación con la IA, es importante definir claramente qué aspectos de esta tecnología son útiles para la empresa y por dónde conviene empezar.
Formar equipos de trabajo que desarrollen proyectos piloto y monitoreen los avances es una estrategia efectiva para integrar la IA en las operaciones empresariales, destacó el ejecutivo.