En las ciudades, en los pueblos y comunidades, las bibliotecas se erigen como espacios que, además de resguardar el conocimiento, son generadores de nuevas oportunidades para las personas.
En el estado de Zacatecas se cuenta con un total de 242 bibliotecas públicas, las cuales están coordinadas por Simitrio Quezada, un hombre que, mediante diversos proyectos, tiene como propósito la renovación de estos espacios para optimizar el aprendizaje y hábitos lectores en niñas y niños.
Buscando siempre enaltecer el sentido de la vida a través de brindar servicio a los demás, la gestión de bibliotecas le ha permitido a Quezada brindar igualdad de oportunidades a niños y adolescentes de distintas comunidades para que tengan acceso a material para su formación.
El coordinador de bibliotecas cuenta con una larga trayectoria profesional y académica que le ha brindado la experiencia y el conocimiento necesario para encauzarlo en su interés por el aprendizaje de las nuevas generaciones. Con 25 años como profesor, la docencia es una de los aspectos laborales que más disfruta.
Ludotecas: el cambio hacia la renovación
Uno de los proyectos en los que se ha trabajado durante los últimos años dentro de las bibliotecas, es la creación de un espacio lúdico, en donde niños y niñas puedan tener un lugar en el cual puedan jugar y divertirse, mientras aprenden y desarrollan nuevas habilidades.
Al inicio de su gestión, Simitrio Quezada se comprometió a que, para septiembre del 2021, por lo menos 100 bibliotecas del estado contarían con una ludoteca. Pese a que la pandemia se interpuso en este propósito, los esfuerzos por realizarlo continuaron.
A partir de un presupuesto anual para la red de bibliotecas que ronda entre los 200 y los 300 mil pesos, cada ludoteca cuenta con diversos juguetes y equipo de aprendizaje, que fue previamente seleccionado con la ayuda de psicólogos educativos.
“Lo que buscamos es que la biblioteca sea un lugar interactivo, donde la gente que quiera consultar enciclopedias y demás tenga su espacio, pero que al otro extremo se ubique la ludoteca, donde los niños jueguen, brinquen y aprendan. […] La ludoteca es un instrumento educativo”.
Una actualización indispensable
Algo que Quezada tiene muy claro, es que las bibliotecas no sólo son lugares de consulta de material bibliográfico, sino que también suelen ser el lugar mediante el cual, personas de comunidades pueden tener acceso a internet, o herramientas electrónicas, etc.
“Hay comunidades donde las bibliotecas ofrecen la única alternativa de comunicación virtual. Por eso es necesario que se pueda proveer de computadoras actualizadas y mejorar los servicios para aquellos que necesitan de este espacio para llenar solicitudes de empleo en línea, para la creación de proyectos e investigaciones, etc”.
Por otro lado, Quezada apunta sobre la importancia de mantener actualizado el acervo de literatura con el cual los más jóvenes puedan interesarse de manera más genuina por ésta. Si bien se cuentan con los materiales clásicos de literatura infantil y juvenil, es preciso que también se tengan las novedades como el Diario de Grey, Bajo la misma estrella y demás.
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