La Dirección General de Calidad y Educación en Salud, adscrita a la Subsecretaría de Integración y Desarrollo del Sector Salud de la Secretaría de Salud, emitió, con fecha 28 de abril, las “Disposiciones para Médicos Internos de Pregrado MIP en Fase 3 de Contingencia por Pandemia COVID-19”.
En un oficio dirigido al presidente de la Asociación Mexicana de Facultades y Escuelas de Medicina (AMFEM), Roberto F. Solís Hernández, y con respecto a las actividades académicas y asistenciales de los Médicos Internos de Pregrado (MIP) en las unidades receptoras de salud asignadas, se informa que aquellos que se encuentren en alguna condición de alto riesgo para enfermedad grave por COVID-19 como pueden ser: embarazo o periodo de lactancia, enfermedades crónicas no transmisibles (pulmonar, cardiaca, hepática, metabólica, obesidad mórbida, insuficiencia renal, lupus, cáncer, diabetes, hipertensión) o inmunosupresión adquirida o provocada, continuarán retirados del servicio y con asignación de tareas a distancia, y seguirán recibiendo su beca durante el tiempo de la contingencia por la pandemia, o hasta el término de su internado médico de pregrado, lo que suceda primero.
Por lo anterior, se hace la aclaración, al final del ciclo, los Servicios Estatales de Salud (SESA) y la Dirección General de Calidad y Educación en Salud (DGCES) expedirán las cartas de término correspondientes.
Asimismo, se señala que en el caso de los MIP sin factores de riesgo, que fueron retirados por el periodo del 7 al 30 de abril, deberán ser reincorporados en unidades de salud no destinadas para atención de pacientes COVID-19, de manera gradual, dentro de la primera quincena del mes de mayo, para su mayor protección y con el fin de dar continuidad a su formación profesional.
De igual modo, se establece que en esta fase III, los MIP sin factores de riesgo deberán permanecer en las unidades médicas por jornadas no mayores a 24 horas y deberán retirarse al término de la misma. En lo posible, deberá respetarse el esquema de guardias A-B-C-D y no ser más frecuentes de A-B-C. El manejo de vacaciones e incidencias se sujetará a las necesidades del servicio y disposiciones de cada unidad receptora.
En este sentido, el documento refiere que los MIP sin factores de riesgo que NO se reincorporen al servicio en las unidades de salud durante la primera quincena de mayo, podrán continuar con su formación académica, según lo defina su institución educativa y, una vez que termine la contingencia por la pandemia podrán retomar sus actividades en la unidad de salud asignada, pero sólo por el tiempo que faltara de la promoción en que se encuentran inscritos. En ningún caso habrá ampliación del ciclo, en virtud de que se incorporarán nuevas generaciones y no habrá campos clínicos suficientes.
También se advierte que los MIP sin factores de riesgo que no se reincorporen al servicio en las unidades de salud durante la primera quincena de mayo, dejarán de recibir la beca correspondiente. El pago de la beca podrá reactivarse a partir de su reincorporación efectiva en las unidades de salud a que sean asignados. En ningún caso se aplicarán pagos retroactivos.
Por otro lado, se indica que los servicios estatales de salud y las unidades receptoras de los MIP deberán remitir a esta DGCES a más tardar el día lunes 18 de mayo de 2020, el formato anexo debidamente requisitado con la información de los MIP a quienes se les suspenderá temporal o definitivamente el pago de la beca.
Al final del ciclo, los SESA y DGCES extenderán la carta de término a los MIP sin factores de riesgo que se hayan reincorporado en el plazo establecido. Los MIP sin factores de riesgo que decidan voluntariamente no reincorporarse podrán solicitar una constancia por el tiempo de servicio efectivo en la unidad de salud receptora asignada.
Las situaciones especiales por causas atribuibles directamente al comportamiento epidemiológico de la pandemia podrán ser revisadas y aplicadas por los SESA, siempre de común acuerdo con las instituciones educativas, e informando a esta DGCES para los trámites administrativos conducentes.
Finalmente, en el oficio, firmado por Javier Mancilla Ramírez, se conmina a los médicos internos de pregrado a continuar con su formación profesional y actuar en apego a su vocación profesional por el beneficio de la población.
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