La industria vitivinícola de Querétaro prevé duplicar las hectáreas de vid en el 2028 para consolidarse como una Indicación Geográfica Protegida (IGP), informó Liliana Cedillo, directora del Clúster Vitivinícola de Querétaro (AVQ).
Los productos IGP son denominados así por poseer una cualidad determinada o características que se atribuyen a su origen y producción geográfica. Sin embargo, Cedillo advirtió que para obtener esta categoría es necesario que Querétaro aumente sus hectáreas dedicadas a la producción del vid.
Cedillo indicó que actualmente hay cerca de 600 hectáreas dedicadas a la producción de la uva en el estado y se busca extender el terreno en cinco años hasta alcanzar las mil 200 hectáreas.
“Estamos buscando el crecimiento en hectáreas de vid, porque la producción de Querétaro en algunos casos exige comprar uva en otro lado, que no está mal, porque es una materia prima; pero sí queremos tenemos una consolidación (..) si necesitamos ir creciendo”, abundó.
En ese sentido, señaló que la uva utilizada en la producción de vino es principalmente originaria de Querétaro, sin embargo, los productores adquieren estos insumos restantes de estados cercanos como Aguascalientes y Zacatecas.
Según Cedillo, actualmente se producen en Querétaro alrededor de cuatro millones de botellas de vino al año y se registra un promedio de 800 mil visitantes anuales, aunado a que se han asentado en la entidad más de 30 proyectos vitivinícolas.