Como parte de las estrategias que múltiples empresas han puesto en marcha ante la contingencia sanitaria derivada de la pandemia de COVID-19, una de las más frecuentes es el de implementar el trabajo a distancia o home office.
Aunque parezca una actividad sencilla, el trabajar a distancia conlleva una serie de retos que implican varios aspectos a tomar en cuenta y que se pueden aplicar en cualquier equipo, particularmente con la situación que se vive en el mundo en este momento.
El experto en condiciones laborales de la Organización Internacional del Trabajo, Jon Messenger, comparte cinco recomendaciones clave para que el trabajo a distancia sea efectivo durante la crisis derivada del COVID-19.
- Apoyo a nivel directivo
Para lograr un trabajo a distancia eficaz, es primordial que exista una constante comunicación entre los integrantes de la alta dirección y los supervisores. Comunicar todos los requerimientos para construir una dinámica más sana.
- Disponer de herramientas y formación necesarias
Es importante para mantener la comunicación entre los compañeros de la organización el brindar los medios y las capacitaciones necesarios para hacer uso de las herramientas que sean requeridas. El uso de Apps y apoyo técnico por parte de especialistas para brindar orientación será primordial.
- Fijar objetivos claros
Los objetivos de la organización así como de las actividades que se van a realizar durante el periodo que se trabaje a distancia deben definirse desde un principio. Se debe establecer a dónde se quiere llegar, bajo qué condiciones se hará y cuáles serán los horarios del equipo. Todo debe ser definido al inicio para evitar sorpresas.
- Respetar la soberanía del tiempo
Se deberá respetar la decisión de los trabajadores y sobre todo brindar la libertad para que su horario y lugar sean los que les convenga mejor para que su productividad sea la mayor posible.
- Crear estrategias propias
Cada persona debe formular su estrategia personal para administrar de mejor manera el tiempo. En este aspecto se incluyen mecanismos para diferenciar el tiempo de trabajo del tiempo personal, a través de, por ejemplo, los espacios de trabajo. Hay que ser capaces de interrumpir las actividades laborales cuando sea hora y dedicarle tiempo al descanso y al ocio.
Ante todo, lo primero que debe existir en este tipo de prácticas es la confianza, pues es el elemento con que se cohesionan todos los puntos anteriores. Es necesario que exista confianza entre las personas que realizan el trabajo a distancia y las que realizan las funciones directivas, así como entre todos los compañeros, para cumplir el objetivo de lograr una estrategia de trabajo a distancia eficaz.
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