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Pasión y experiencia: Lucía Mazzocco

Debido a que el potencial de la industria de eventos y convenciones va en ascenso, conviene ver qué es lo que se está haciendo bien en temas de organización, viajes y hotelería. Cada una en su área, Lucía Mazzoco, Maricarmen de Alba y Fabiola Inguanzo han sabido marcar la pauta.

En este artículo profundizaremos en la trayectoria de Lucía Mazzocco, quien tiene un ojo avezado para elegir destinos únicos, motivo que ha llevado a su empresa a ser una apuesta segura.

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Donde nace la experiencia

Desde sus inicios, Lucía Mazzocco se ha mostrado como una pieza clave de la vida empresarial dentro de la industria turística mexicana. Al poco tiempo de ingresar al negociode los viajes, logró la primera franquicia en el país de la mano de una compañía internacional de origen francés.

“Los viajes son parte de mi ser. Mi padre procuraba llevarnos a diferentes lugares y mi marido era un eterno viajero, así que cuando me quedé viuda supe lo que debía hacer. Empecé un poquito en broma, pero después empecé a tomar cursos para hacerle frente a todas las responsabilidades. Me siento orgullosa de retribuir a Zacatecas algo de lo que me ha dado”, rememoró.

A lo largo de su carrera ha tomado decisiones arriesgadas que han derivado en resultados impresionantes. Una de ellas fue finalizar la relación con la franquicia francesa, enrolarse con otra norteamericana, emprender el camino en solitario y aceptar diversas fusiones. En cada paso, Lucía ha demostrado una visión empresarial inquebrantable, posicionándose como un ejemplo para todos los que le siguen la pista.

Hasta el momento, Viajes Mazzocco se ha consolidado como una empresa de avanzada en su rubro, pues su huella está bien marcada en la historia. La empresaria menciona que los clientes pueden estar seguros de que sus viajes estarán a la altura de sus expectativas, pues ofrece un servicio especializado y basado en la experiencia, visión que comparte con sus asesores.

“Algo muy importante que he aprendido en mi carrera es que se necesita un equipo sólido. No se puede ser ‘la mujer maravilla’ si no se tiene un respaldo. La disciplina es necesaria para alcanzar un buen nivel de compromiso, también establecer reglamentos internos y mantenerse en formación con varios cursos”, comentó.

El futuro augura un largo camino para la empresa, justo como Lucía lo planteó desde el inicio. En los siguientes años espera seguir trabajando duro, encontrando nuevos desafíos y probándose a sí misma que todos sus planes son posibles.

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