Si bien sabemos que la gastronomía de nuestro país es deliciosa, la propuesta de Nahual, restaurante liderado por el chef Claudio Innes, lleva la cocina mexicana a un nivel superior a través de una oferta de valor sustentada en ingredientes de primera calidad, cocina desde cero y un impecable servicio: una experiencia imperdible.
Ubicado en pleno corazón de la ciudad en la calle Madero, en uno de los predios más bonitos y antiguos de la ciudad con un amplio estacionamiento para comodidad del comensal que visita el centro, Nahual destaca por su alta gastronomía mexicana a través de dos vertientes muy bien complementados: un menú de platillos clásicos y distintivos de nuestra cultura, y otra gama de platillos de cocina de autor.
“Somos una cocina muy perfeccionista, con una presentación muy bonita. Los comentarios de los clientes son muy, muy buenos. El que cruza la puerta del restaurante, sale contento”, resume Claudio Innes.
A través de una selección minuciosa de los mejores ingredientes para ofrecer platillos únicos, Nahual resalta por su cocina desde cero, en el que todos sus insumos son primarios -no hay ninguno secundario- gozando de un control absoluto del proceso de elaboración de los alimentos.
“Todo lo hacemos desde la a hasta la z, con mucho producto local y nosotros elaboramos todo en casa”, agrega.
Procurando ofrecer platos de diferentes regiones de México preparados con ingredientes de gran calidad y técnicas culinarias muy desarrolladas, una de las propuestas distintivas de Nahual es su amplia variedad de moles para encandilar a todo paladar.
“Manejamos alrededor de cinco moles de manera permanente; la estrella de nuestra carta siempre ha sido el Mole de novia, que está hecho a base de almendras y piñones. También tenemo otros moles hechos desde cero, como de cacahuate, de pepitas, mole negro oaxaqueño, mole de vino tinto, etcétera”, describe el socio fundador y chef.
Algo que ha tenido muy buena aceptación entre los clientes de Nahual es su menú de degustación a través de una oferta muy vasta y copiosa cuyo objetivo es que el comensal tenga la experiencia completa de la alta cocina mexicana.
“Nos encantan los platos al centro y que toda la familia y los amigos compartan”, puntualiza Claudio Innes.
En este sentido, destacan platillos como las chalupas de tzic de venado, setas al ajo con puré de zanahoria, el aguachile de filete de res y el tiradito de lengua con escabeche. Como postre no te puedes perder la nieve de pirul y tartaleta de chocolate.
La carta de coctelería reluce por su atractiva mixología, en la que sugerimos recomendar el Nahual Rojo (a base de mezcal y jamaica) y el Nahual (base de mezcal, pepino y orégano). Como digestivo, debes de probar el mezcarajillo, el cual lleva mezcal, miel de agave y café, la mejor opción para coronar una experiencia degustativa sin igual. El restaurante también destaca por su amplia selección de vinos de la más alta calidad acordes a los platillos que ofrecen.
La atmósfera íntima y acogedora que brinda el bello recinto ofrece el mejor ambiente para disfrutar la mejor experiencia; con sus vistas preciosas, Nahual ofrece salones privados para disfrutar con la familia u organizar eventos privados.
A 10 minutos del sur y del centro, este lugar de excelencia localizado en una de las calles más bonitas que ofrece Aguascalientes con la posibilidad de encontrar un lugar de estacionamiento al lado del restorán, no visitar Nahual es privarse de una experiencia gastronómica irrepetible.