Las telecomunicaciones y la conectividad se han convertido en herramientas fundamentales para el desarrollo personal. Gracias a esto, miles de profesionales se han añadido al esquema laboral conocido como freelance.
El término freelancer, que se puede traducir como independiente o autónomo, hace referencia a una modalidad laboral en la que la persona ejerce su profesión por cuenta propia y no trabaja para otra persona o empresa. Según la legislación mexicana, contemplada por el Código Civil Federal, se considera esta actividad como “prestación de servicios profesionales”.
De acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), al final del segundo trimestre del 2021, México contabilizó quince millones 198 mil 749 trabajadores independientes (la mayoría de entre 50 a 59 años). Asimismo, de acuerdo con Workana, plataforma especializada en contratación de freelancers, uno de cada cuatro profesionistas trabaja bajo el esquema de freelanceo.
En este sentido, Líder Empresarial entrevista a seis profesionales que ofrecen servicios bajo este esquema de contratación, e indagamos sobre la gestión de su oficio, sus áreas de especialidad, el mercado al que sirven, así como los beneficios que han conseguido al trabajar como independientes.
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Idalia Castañeda: Intérprete
Licenciada en Artes Visuales, con especialización en Fotografía; desde joven, Idalia tuvo una atracción especial por los idiomas. Esto la llevó a especializarse hasta convertirse en intérprete freelance.
Idalia Castañeda habla cuatro idiomas: inglés, francés, italiano y español, por lo que ha colaborado con diversas instituciones, ONG’s, centros penitenciarios, centros de refugiados, escuelas, aduanas, hospitales y otros.
Comenta que, contrario a otras profesiones, el servicio de interpretación incrementó su demanda durante la pandemia, ya que los doctores no hispanohablantes necesitaron contactarse con pacientes graves de distintas nacionalidades.
A su vez, indica que, gracias a la cantidad de horas acumuladas interpretando, ha recibido diversas certificaciones que avalan su trabajo (actualmente por dos mil horas). Además, su oficio le permite desarrollar diferentes habilidades que se traducen como valor agregado: escucha atenta, empatía, trabajo bajo presión, entre otras.
“He interpretado desde a una mujer que está dando a luz hasta a un detective”, señala.