El éxito de un proyecto no siempre remite al esfuerzo y trabajo que implica llevarlo hasta ahí. En Líder Empresarial nos reunimos con David Rubio, fundador y director general de la franquicia Waffles & Coffee, para conocer la historia detrás de esta empresa zacatecana que en menos de diez años ha conseguido el crecimiento y presencia ante el público que pocas han logrado.
David siempre se propuso tener un negocio propio, fue así que a los 28 años, con una profesión y experiencia en varias empresas, se guió con una idea, pasión y mucha perseverancia para emprender en el sector restaurantero.
“Tenía más o menos una idea de cómo iban a ser las cosas. Obviamente yo no inventé ni los chilaquiles, ni los waffles, ni las crepas, todo eso ya existía. Simplemente me traje la idea de los waffles que conocí en una ciudad en la que viví” nos platica David Rubio quien añade: “Recuerdo que desde que era muy pequeño me llamaba la atención todo lo que involucra al café”.
Así que comenzó a armar el plan de lo que sería Waffles & Coffee. Cuando tuvo armado el proyecto, se lo presentó a dos posibles inversionistas, quienes, después de analizar a fondo el negocio que se les proponía, decidieron apoyarlo.
Trabajo duro y constancia
Waffles & Coffee abrió sus puertas el 22 de enero del 2011 en un local ubicado en la Av. Pedro Coronel, en Guadalupe, Zacatecas. Misma dirección donde actualmente tienen una de sus unidades.
David cuenta que al principio no fue fácil, ya que solo se encargaban del negocio él y Rafa, el cocinero. Dice: “yo era el administrador, el barista, el cajero, el mesero, era el de los mandados, tenía que hacer de todo ya que éramos sólo dos trabajadores”. Esto en jornadas que iban desde seis de la mañana hasta casi las 12 de la noche, los siete días de la semana. Durante 5 años David mantuvo esta rutina de trabajo, mientras despegaba Waffles & Coffee.
Aunque actualmente los waffles son su producto estrella, hace nueve años no eran tan conocido en Zacatecas. No fue hasta que introdujeron en el menú desayunos como chilaquiles y omelettes, que el público empezó a familiarizarse con el concepto de «waffle».
Un momento clave fue su presentación en la Feria Nacional de Zacatecas en el 2011, lo que permitió al público familiarizarse con la empresa y generar ventas importantes. David nos platica que esperaba recibir la cuesta de enero y se mentalizaba para resistirla, sin embargo, esta nunca llegó.
Waffles & Coffee tuvo un crecimiento sin precedentes durante enero del 2012, que se duplicó en 2013, lo que propició la contratación de más personal y establecerse en un local más amplio. Sobre esta etapa David reconoce:
“Quien dice que logra las cosas solo, está mintiendo, siempre necesitas la ayuda de alguien más. Mi mamá me auxilió desde el evento de la Feria y desde entonces ha estado a cargo de algunas actividades. Mi soporte emocional, mi esposa, se convirtió en un apoyo ideal para mí con su tenacidad y atención a los detalles. Siempre hubo gente dispuesta a apoyarme. Ya fuera recomendándome a personas, o yendo varias veces por semana acompañados por una persona distinta”.
Las franquicias
Aunque no fue su objetivo al crear Waffles & Coffee, a David siempre le interesó el concepto de las franquicias. En algún momento se acercó a un despacho de la Ciudad de México experto en el tema, para ver la posibilidad de franquiciar el restaurante, sin embargo, los requisitos exigían que la empresa tuviera al menos 4 años y una sucursal.
Fue en 2016 que se dieron grandes pasos en el crecimiento de la empresa, en tan solo unos meses se crearon dos franquicias de la empresa y se abrió otra unidad en Zacatecas. La primera tuvo sede en Durango; la siguiente se abrió en marzo de ese mismo año en Aguascalientes; mientras que la nueva unidad en Zacatecas Centro se abrió en agosto de este mismo año.
David nos comenta que mantener la calidad de Waffles & Coffee no es cosa fácil, ya que hay que tener un control muy preciso de los detalles. Uno de los principales objetivos del restaurante es poner especial atención en la preparación de alimentos y calidad de los productos primarios.
“Mi objetivo siempre ha sido crear algo valioso, algo trascendente. Siempre tuve presente que para lograrlo era necesario sacrificar muchas cosas, estar dispuesto a trabajar día y noche” concluye David Rubio.