Después de un ciclo escolar lleno de retos, el Colegio Everest ha concluido sus actividades con un evento de clausura en el Teatro Calderón de Zacatecas. El 2 de julio se dieron cita autoridades y estudiantes de preescolar, primaria, secundaria y Bachillerato Anáhuac para dar cuenta del suceso.
La ceremonia fue posible gracias a la implementación de rigurosos protocolos de seguridad e higiene. Asimismo, se apostó por hacerlo de forma escalonada, con el objetivo de garantizar la sana distancia entre las familias y el personal del Colegio.
Se reconoció a cada uno de los alumnos por el esfuerzo, dedicación y desempeño que alcanzaron durante el ciclo escolar. Por parte de la institución, se explicó que siempre buscan dar seguimiento a los estudiantes para que logren y rebasen las metas; contando con una guía tanto espiritual, como académica y socioemocional.
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Portafolios de evidencia, una herramienta indispensable
De acuerdo con la información proporcionada por el Colegio, el portafolios de evidencia es una herramienta de evaluación que brinda valor personal a los alumnos; en tanto que reconocen aciertos y retos; mientras que aprenden y desarrollan las competencias planteadas para el perfil de egreso.
Es decir que los jóvenes construyen y cuentan su historia de aprendizaje, registrando los pasos que fueron necesarios para conseguir conocimientos reales y significativos. Entre los intereses que promueve se encuentran:
- Interés por la narrativa.
- Desarrollo de la capacidad de procesar, organizar, explicar y dotar de significado las experiencias.
- Favorecer la memoria del aprendizaje.
- Reflexión de situaciones o problemáticas de la vida cotidiana.
Para hacerlo posible, el aprovechamiento óptimo de esta herramienta no sólo recae en los alumnos, sino que se trata de un trabajo colaborativo con docentes y formadores. Debido a lo anterior, al cierre del ciclo escolar los alumnos son protagonistas de su propio aprendizaje.