Tal parece que una empresa mexicana aportaría materiales para la construcción del muro que Donald Trump prometió durante su campaña por la presidencia, con el que busca evitar el ingreso de ilegales a Estados Unidos.
Argumentando que “No podemos ser selectivos”, el director de Grupo Cementos de Chihuahua (GCC), Enrique Escalante, mencionó que podría vender cemento y concreto para la construcción del famoso muro de Trump.
«Somos un productor importante en esa zona y tenemos que respetar a nuestros clientes en ambos lados de la frontera»
El directivo de GCC, con sede en la frontera de Chihuahua, asegura que buscará formar parte de la obra, suministrando el concreto y cemento que sean necesarios y aseguró que «Somos un productor importante en esa zona y tenemos que respetar a nuestros clientes en ambos lados de la frontera».
Las promesas de Trump como un posible impulso
Para el directivo las propuestas de impulsar proyectos de infraestructura y energía en el mercado estadounidense que Trump mencionó durante su campaña, pueden ser un impulso alentador para su empresa, ya que tres de las plantas de GCC se encuentran en tierras norteamericanas y son ellas las que aportan el 70% de sus ventas totales.
«Para el negocio en el que nosotros estamos, Trump es un candidato que favorece bastante la industria»
Con la caída del peso, el ejecutivo ve otro empuje a su favor, «Para el negocio en el que nosotros estamos, Trump es un candidato que favorece bastante la industria», asegura.
Tras cerrar una adquisición de una serie de activos de Cemex con una de sus filiales en Estados Unidos con un valor de 306 millones de dólares, las acciones de GCC ganaron un 1.59% en la Bolsa Mexicana de Valores hasta los 64.0 pesos, su precio más alto desde 2008.
¿Qué tan real es el muro de Trump?
Antes de enojarte con GCC, toma en cuenta que analistas políticos de Estados Unidos mencionaron que el muro propuesto por Trump puede ser únicamente una ilusión, ya que representa altos costos económicos y provocaría alteraciones en la relación bilateral.
Según los especialistas, en lugar de un muro, el nuevo presidente tomará medidas extremistas, como enviar más fuerzas de seguridad a la frontera y reforzar las cámaras y vallas de vigilancia.