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¿Y si la llave para acelerar el desarrollo industrial de Aguascalientes está en la universidad? 

Oportunidades para el sector desde la educación superior

Estudiar una profesión en México no está al alcance de todos. Solo 3 de cada 10 jóvenes en edad de acudir a la universidad en el país tienen la oportunidad de hacerlo. La Secretaría de Educación Pública (SEP) registra 3.91 millones de personas inscritas en alguna de las 4,894 instituciones de educación superior públicas y privadas que hay en la república mexicana. Solo el 4 por ciento de esos estudiantes logrará avanzar hacia los estudios de posgrado.

En Aguascalientes, aunque la situación es un poco mejor, los bajos niveles de cobertura son también preocupantes. De la población de 18 a 24 años, solamente el 28.83 por ciento (48,608) se encuentra estudiando algún grado de educación superior.

A pesar de esto, el verdadero reto está al terminar los estudios universitarios: conseguir un lugar en el mercado laboral es cada vez más complicado.

En la era de la especialización, el sector productivo exige profesionistas con perfiles cada vez más enfocados en áreas concretas. Cuando los egresados no cumplen con estas características, las empresas promueven la atracción de capital humano de origen extranjero, lo cual mitiga las oportunidades de crecimiento de los profesionales locales.

Esto es lo que pasa en Aguascalientes, un estado que a pesar de su crecimiento económico (46 por ciento mayor que el promedio nacional), no ha explotado todo el potencial de su capital humano.

Francisco Javier Cabrera, maestro en Políticas Públicas, especialista en Economía de la Educación y profesor investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), hace un análisis sobre las oportunidades que tiene la entidad en materia industrial, por medio del fortalecimiento de la educación superior.

Ingenierías: un motor de desarrollo sin mantenimiento en Aguascalientes

Aguascalientes es un estado manufacturero que en los últimos años ha fortalecido su posición a nivel nacional en este rubro, gracias a la entrada de importantes inversiones extranjeras. Al día de hoy, cuenta con 154 empresas comerciales provenientes de 24 países diferentes; en su mayoría, estas compañías están ubicadas en algún área de la cadena de suministro de la industria automotriz.

Siendo una entidad dedicada casi totalmente a la manufactura, las ingenierías cobran especial relevancia como la base principal de su enriquecimiento económico.

“Aguascalientes se ha concentrado mucho en este sector. Antes manufacturaba textiles, ahora autos; incluso esta industria [la automotriz] está viendo muchos cambios recientes, producto de las relaciones políticas internacionales. Entonces, creo que la apuesta del estado debiera ser hacia ramos económicos de mayor valor agregado”, comparte el especialista.

Para ello, agrega, se necesita invertir más en capital humano y aumentar la oferta de carreras universitarias que el sector productivo demande.

En la entidad, hay 40 instituciones de educación superior, 18 públicas y 22 privadas. Juntas ofertan 369 carreras profesionales. Las más demandadas en las universidades públicas son las ingenierías, y en las privadas, las licenciaturas. Este comportamiento tiene como resultado una demanda moderada de ingenierías por parte del mercado estudiantil.

“Las universidades privadas tienen muchas más opciones de ofrecer lo que es más barato: es mucho más sencillo y barato ofrecer una carrera de contabilidad o de administración, que una ingeniería donde se necesitan laboratorios, computadoras y profesores bien capacitados, que no hay muchos porque no hay ingenieros”, explica.

Las ingenierías representan una gran oportunidad para que el estado destaque como polo de manufactura, ya no solo a nivel nacional, sino también a nivel internacional.

«Si queremos aumentar la cantidad de personas dedicadas a la tecnología, debemos empezar a acercarlas desde edades tempranas»

Un problema que no se corrige en sus etapas primarias

A decir de Javier Cabrera, la fuente del bajo interés por programas educativos relacionados con la ciencia y la tecnología no se encuentra en la educación superior, sino en los niveles educativos previos a este, en los cuales no se atienden correctamente los problemas que los estudiantes presentan en materias referentes a la resolución de conflictos y pensamiento abstracto.

De acuerdo con el experto, los alumnos de nivel medio superior tienen muy pocas herramientas para aspirar a este tipo de carreras —no les va muy bien en matemáticas, nunca llevan una materia sobre programación, sus clases de informática son insuficientes–, lo cual genera que el mercado de las ingenierías sea un tanto limitado.

Entonces, ¿qué se debe hacer para aprovechar de mejor manera la posición de Aguascalientes dentro de la industria? El investigador cree que el estado debería proponer una política educativa integral, en la cual se establezcan nuevos estándares para las universidades, se incentive la oferta de los programas de ingeniería a través de recursos como becas y asesorías, y sobre todo, se fortalezcan (en primaria y secundaria) las materias relacionadas con las tecnologías de la información y el software.

“Si queremos aumentar la cantidad de personas dedicadas a la tecnología, debemos empezar a acercarlas desde edades tempranas; esto debería ser una política más integral”, concluye.

3 sectores que están en la mira de las universidades o que deberían estarlo

Con el rápido avance de la tecnología, han surgido nuevas profesiones que antes ni siquiera se habrían podido imaginar. Conscientes de esta evolución, las universidades tienen el reto de adaptar sus planes de estudio, con el fin de formar a los profesionistas que llevarán a Aguascalientes por el camino del éxito.

Para lograr esto, la educación superior en el estado deberá voltear a ver tres sectores de la industria que, según el investigador, tendrán un futuro prometedor:

  1. Tecnología (programación). El desarrollo de la entidad tiene que apuntar hacia la creación de valor agregado, hacia una economía de servicios tecnológicos más independiente de los vaivenes de la economía internacional.
  2. Energía. La apuesta debe ser hacia las energías renovables. Aguascalientes tiene sol 360 días del año, por lo que la generación de energía fotovoltaica se presenta como una oportunidad importante. A esta se le une la energía eólica: la entidad cuenta con altos cerros que están en óptimas condiciones para el desarrollo de esta industria.
  3. Agronegocios. Quizá el más importante de los tres. El área de oportunidad no se presenta en la agricultura, sino más bien en la innovación, y la mejora de semillas y productos.
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