El 4 de agosto la revista científica The New England Journal of Medicine publicó un estudio en el que alerta a la sociedad sobre un nuevo virus zootécnico del tipo Henipavirus. El cual recibe el nombre de Virus Langya y fue hallado en dos provincias al este de China, Henan y Shandong.
Esta enfermedad infectó a un total de 35 pacientes en estas provincias. Y por el momento los estudios realizados en la zona indican que uno de los animales que reservorio de la enfermedad es la musaraña. Esto es todo lo que debes saber sobre este padecimiento recién descubierto:
¿Qué dice la OMS al respecto?
El LayV o virus Langya pertenece a la familia Paramyxoviridae, en la que también se encuentran el sarampión, la papera y el virus respiratorio sincitial. La enfermedad fue identificada gracias a que los médicos realizaban un monitoreo de rutina, y encontraron el virus en pacientes que eran agricultores y habían estado expuestos a un animal reservorio.
El virus recibe el nombre de la ciudad de donde era originaría la primera persona en ser identificada con el virus, una mujer de 53 años natural de Langya en Shandong. Además, los científicos encargados de identificar la enfermedad concordaron en que los pacientes no transmitieron la enfermedad a terceros.
Por esta razón, debido al escaso número de personas infectadas que hay hasta el momento, ni la OMS ni los investigadores pueden ofrecer conclusiones definitivas respecto a la enfermedad. De manera que, por lo menos por ahora, no hay motivos por los que este padecimiento deba alertar a la ciudadanía.
Síntomas del Virus de Langya
Entre los síntomas más comunes que se reportaron entre los 35 portadores de la enfermedad se observaron:
- Fiebre
- Fatiga
- Tos
- Dolores musculares
- Náuseas
- Dolor de cabeza
- Vómitos
Además, algunas de las personas infectadas con sintomatología más grave también presentaron un bajo número de glóbulos blancos y plaquetas, alteraciones en el hígado y el riñón, e incluso neumonía.
Es importante mencionar que ninguno de los 35 pacientes contagiados murió a causa por el virus de Langya, y, aunque aún no se puede saber a ciencia cierta si el riesgo de fallecimiento es bajo, podemos estar seguros de que la enfermedad aún no es una amenaza.
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