Reforzando las acciones que conforman la Unidad antifugas, Veolia Aguascalientes, en coordinación con la Comisión Ciudadana de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Aguascaliente (CCAPAMA), implementó la detección de fugas no visibles en la ciudad de Aguascalientes a través de la aplicación de termografía. De tal forma, será determinada mediante drones de última generación.
El dispositivo teledirigido, que mide más de un metro entre sus extremos, está conformado por cámaras térmicas, duales e infrarrojas. Este permite un monitoreo más preciso, así como la detección oportuna de fugas desde las alturas, basándose en la termografía de las zonas sobrevoladas.
La estrategia en esta modalidad se encuentra en un recorrido por la ciudad de centro a poniente y oriente. Inicia en el primer cuadro de la ciudad, en la calle General Barragán y alrededores de la zona centro, hasta en las inmediaciones del Instituto Tecnológico de Aguascalientes, con lo que abarca un área de más de 120 hectáreas.
El tiempo de operación de la primera emisión constó de 48 horas de vuelo, entre turnos diurnos y nocturnos. Abarcó las zonas trazadas para la detección de los desperfectos que no se encuentran visibles y se aplicó un método de detección no invasivo, para posteriormente, realizar las reparaciones correspondientes en pro de la preservación del vital líquido.
La inspección termográfica indica, a través del cambio de temperatura, las zonas en las que se presentan pérdidas del recurso en las redes de conducción y distribución. Por ello, logran ser detectadas en un lapso de tiempo inferior al promedio, además de ofrecer detalles puntuales adicionales a la inspección visual, como la medición del caudal de entrada y salida de un determinado tramo de tubería, con un margen de error mínimo.
Al ser de dimensiones considerablemente grandes, las líneas de conducción transportan un caudal de agua importante. Por estas mismas condiciones, una fuga en este tipo de ductos representa una pérdida económica y de recursos muy importante. La eficacia de esta técnica de localización depende de varios factores como: la profundidad de la tubería, el material de relleno de la zanja de instalación, el material superficial y la diferencia de temperatura.
Los operadores de esta nueva tecnología, cuentan con certificaciones de técnicos termógrafos internacionales nivel l, ll y lll. Además se realizan las inspecciones bajo las normas ASME E1934, ANSI, ASNT, ISO-18436-7 y ICE-TS-62446-3. Con ello se asegura la mejor precisión y excelentes resultados de la estrategia de la Unidad Antifugas.