Cuando la cocina de algún restaurante es realmente trascendental, tiene la virtud de transformarse en un vehículo para conectar con más personas. Una experiencia gastronómica no sólo destaca por su sabor, sino por la creatividad y satisfacción estética que transmite —y que para disfrutarse necesita compartirse—.
Así son las visitas a Tolosa, ocasiones singulares para conocer la magia de la cocina contemporánea. Con una fusión entre las raíces de la cocina mexicana y la gastronomía de distintos países, cada uno de sus platillos se caracteriza por sus sabores atrevidos que se convierten en creaciones únicas.
Ya sea por su mixología, cocina o ambiente, a un año de su inauguración, Tolosa se ha distinguido por su estilo y calidad. Como un emprendimiento que nació durante el 2020, un año en el que la incertidumbre predominó en el sector de servicios, se ha convertido en un lugar predilecto para crear nuevas memorias.
Siempre buscando estar a la vanguardia, su cocina convierte cada receta en todo un momento sensorial, al incorporar texturas y sabores distintos en platillos tradicionales.
Para Marcela Arteaga Estrada, CEO del restaurante, el chamorro adobado y el salmón en salsa de mango son dos platillos imprescindibles al visitar el restaurante. Como ejemplo de tradición, el primero está acompañado de una salsa, receta especial de su madre —que transmite una calidez y sazón que despiertan la memoria del hogar—.
A su vez, el nombre del restaurante también guarda un significado especial para Marcela. Como un recordatorio de sus raíces, hace referencia a Juan de Tolosa, uno de los fundadores de Zacatecas —ciudad de la que es originaria—.
Este concepto también se transfiere al ambiente del lugar, puesto que Tolosa busca que la magia de la hospitalidad se transfiera a clientes y amigos.
A través de los eventos que han tenido a lo largo de este año, como “Festival Español”, “Viaje por el mundo para mamá”, “Festival Italiano” y el “Festival las Catrinas de Tolosa”, han reunido a familias y parejas en torno a su mixología y cocina de autor. Cada uno de sus detalles y cuidados han hecho la diferencia, provocando grandes sonrisas.