Uruguay ha sido destacable en su lucha contra el Covid-19, incluso según una encuesta de la consultora Trespuntozero, el líder mejor evaluado fue el presidente de aquel país, Luis Lacalle Pou, con una aprobación del 77.8%. La incorporación a las aulas ha sido posible en el país sudamericano debido a la baja incidencia del virus y los protocolos sanitarios que implementa.
A partir de un proceso gradual han vuelto a las aulas distintos niveles académicos a partir del 22 de abril se integraron a clase un número limitado de escuelas rurales, aun cuando las condiciones no eran aún las más adecuadas, según la Federación Uruguaya de Magisterio, no obstante, el cometido se logró de la manera esperada. Desde inicios de junio se iniciaron las clases en algunos otros planteles, de manera en la que lo realizó Francia, se hizo un asunto voluntario
La reincorporación de los planteles cercanos a la capital se dieron bajo un clima en el que se es consciente de que el riesgo de contagio existe, pero es parte de la nueva normalidad del país y un paso insustituible para el sistema educativo. Alrededor de 256 mil estudiantes de todos los niveles educativos ahora están tomando clases en todas las regiones uruguayas.
Donde se ha puesto especial interés en salvaguardar la salud de los estudiantes es en el departamento 33, el cual colinda con Brasil, pues hace apenas unos días las autoridades de salud identificaron un brote que podría desestabilizar la forma en la que el país ha avanzado en la erradicación y contención del virus.
Los filtros al ingreso a las instituciones constan de un cuestionario en el que se interroga al asistente de manera que se puedan identificar síntomas afines al Covid-19 y luego se procede a tomar la temperatura; el uso de cubrebocas no es obligatorio y los grupos están divididos para evitar las aglomeraciones.