Rumbo al 1° de diciembre, se sigue avanzando en la realización de los ajustes necesarios para que se dé la transición del poder. Y alguien que ha empezado a destacar en este panorama es el hidrocálido Carlos Manuel Urzúa Macías, doctor en Economía por la Universidad de Wisconsin, quien además de una trascendente vida como académico e investigador, ha sido consultor para el Banco Mundial, el PNUD y la OCDE, y ya ha trabajado con el presidente electo (cuando éste era jefe de gobierno de la Ciudad de México). Así pues, Carlos Manuel Urzúa tiene un excelente perfil académico-profesional, que lo convierte en una de las personas mejor preparadas para desempeñar el cargo para el cual ha sido propuesto.
Tan relevante será su función que a pesar de formar parte de un equipo de transición, de inmediato se ha puesto a laborar, ha dado entrevistas, ha propuesto a los funcionarios principales de su grupo de trabajo e incluso ha indicado algunos importantes cambios de políticas, como la recién anunciada centralización de las compras públicas cuyo fin es el combate a la corrupción.
Ojalá que, como a todos los colaboradores del presidente electo, le vaya muy bien en un país que tiene una gran necesidad de credibilidad y mano firme.