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Tres tercios de aroma

 El puro es un placer gourmet, equiparable a los vinos, cervezas artesanales y quesos. Es por ello que se ha convertido en signo de poder y lujo. Diversos personajes históricos, desde Winston Churchill hasta el Che Guevara, eran amantes de este producto. 

Incluso, John F. Kennedy, antes de firmar la ley de embargo contra Cuba en 1960, mandó pedir de la isla mil puros marca Upmann, ya que después del decreto, serían ilegales en Estados Unidos… Con todo y el bloqueo estadounidense, los puros cubanos son de los más prestigiosos y vendidos en todo el mundo: Montecristo, Partagás y Cohiba son las marcas más reconocidas. 

La calidad de este producto se atribuye a las condiciones de la tierra donde se cultiva el tabaco. Los principales productores de esta planta son Cuba y Nicaragua, aunque México también tiene un lugar importante en este rubro. La marca mexicana más famosa de puros es Te-Amo. 

Se calcula que la industria premium (es decir, los puros hechos a mano) mueve unos 1,500 millones de dólares al año; Estados Unidos y Europa son los principales compradores.

¿Cómo se marida? Según la capa y los sabores. La tradición es combinarlo con ron o café; sin embargo, un puro de cuerpo fuerte se puede acompañar con whisky y uno amargo va muy bien con bebidas dulces.

Foto: Eduardo Escamilla

La tabaquería más antigua de Aguascalientes 

Don Enrique Castaingts, originario de los pirineos franceses, llegó a Aguascalientes en los años cuarenta. Amante del tabaco, comenzó a traer puros a la ciudad hidrocálida, donde no existían tabaquerías y este producto era difícil de conseguir. 

Contactó a algunas marcas de Veracruz y empezó a traerlos. Se los regalaba a sus amigos ganaderos; con el tiempo, todos iniciaron a encargarle pedidos. Él era el único que los traía a Aguascalientes”, cuenta Alejandro Castaingts, quien actualmente está al frente del negocio que fundaron su abuelo y su padre. 

Tabaquería Plaza, ubicada en la calle Juan de Montoro esquina con Colón, abrió sus puertas en 1985 y tuvo tanto éxito, que comenzó a comercializar puros cubanos y diferentes artículos para el tabaco. Pronto, se convirtió en una franquicia y se expandió por toda la ciudad. 

En la actualidad, vende por internet a todo el mundo y los millennials de 20 a 30 años son los que más compran sus productos: el puro De la casa y el Tabaquería Plaza. 

Para empezar a conocer el mundo de los puros, un buen comienzo es un puro pequeño; sin embargo, un puro grande es más fácil de fumar y de percibir sus aromas y sabores”, recomienda Alejandro. 

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