Al igual que todos espacios turísticos de París, la Torre Eiffel permaneció cerrada durante los tres meses que duró la cuarentena. Ahora, con su reapertura les ha dado una sorpresa a sus visitantes con la inhabilitación de los ascensores, de manera que sólo se puede alcanzar su segundo piso a través del uso de escalones, 674 para ser precisos.
Para ingresar al sitio los turistas deben hacer fila y seguir los protocolos de sanidad e higiene, portar mascarilla protectora y pasar los controles de seguridad. Cabe destacar que el punto más alto de la Torre se encuentra aún cerrado, pues su acceso es prácticamente viable sólo por ascensor y estos entrarán en funciones hasta el próximo mes.
Según lo difundido por Reuters, el lapso que estuvo cerrada la Torre Eiffel es el más largo desde la Segunda Guerra Mundial, por lo que este suceso es trascendental para la historia contemporánea. Se estima que las pérdidas son de al menos nueve millones de euros por mes.
En cuanto a otros sitios turísticos parisinos, ya se están tomando las medidas correspondientes para atraer visitantes y acrecentar el flujo económico de la ciudad. Tal es el caso del Museo Louvre que iniciará una campaña de promoción local o Disneyland París que planea su reapertura en unas semanas con protocolos sanitarios estrictos.