En un principio Oscar Eduardo de la Rosa sólo sentía cansancio, ningún otro síntoma del virus, no obstante, días más tarde empezó con “el cuerpo cortado” y acudió al Módulo Respiratorio de su Unidad de Medicina Familiar (UMF).
Ahí le practicaron la prueba para detectar el virus, le ordenaron aislamiento domiciliario y le pidieron reportar de inmediato la aparición de cualquier síntoma. Tras dos días en casa, presentó fiebre y dificultad para respirar, por lo que regresó a su UMF, en donde el médico decidió remitirlo al Hospital General de Zona (HGZ) No. 2.
“En realidad parecía una gripa leve. Fue hasta que quise levantar una cubeta con agua, cuando me di cuenta de que no podía respirar y decidimos ir al Seguro. Lo más importante para mí en esos momentos fueron las palabras de seguridad y respaldo que me dieron los médicos y enfermeras, porque la verdad, tenía miedo”, expresó.
“La primera tomografía de tórax del paciente Oscar Eduardo mostraba un daño menor en pulmones, gracias a que acudió al médico en cuanto se manifestaron los primeros síntomas. Eso nos dio oportunidad de iniciar su manejo, con mayores probabilidades de éxito”, explicó el jefe de Medicina Interna del HGZ No. 2, Simón Alcántara Méndez.
A pesar de lo anterior, el galeno señaló que aun sin comorbilidades el paciente requirió nueve días de estancia hospitalaria, oxigeno suplementario y cuidados intensivos para lograr su recuperación.
“Yo agradezco mucho a todos los que trabajan en el IMSS, porque de todos recibí una atención de 10 y sé que ellos salvaron mi vida. Lo dan todo para cuidar a los pacientes… es un trabajo muy intenso, yo lo vi», refirió Oscar Eduardo.
También pidió a la población usar cubrebocas y mantener la sana distancia para prevenir contagios, y para aquellos que han sido diagnosticados con la enfermedad los exhortó a respetar el aislamiento en casa y reportar de inmediato al médico la aparición de síntomas.