Actualmente, para la supervivencia de una empresa, ya no es suficiente contar con una buena cantidad de ingresos y un mayor margen de utilidad. La dinámica y las necesidades de un mundo en constante evolución demandan estrategias para permanecer y, lo más importante, crecer.
En ese sentido, un tema que resuena en las sedes de los corporativos a nivel mundial es la Sustentabilidad. Este compromiso ocupa a los grandes empresarios, pero también debe estar en la agenda de las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs).
Muchas de ellas se pierden en el mapa, porque suelen considerar “sustentable” el compromiso social como donativos, reforestación y conservación de su comunidad, pero realizado en iniciativas aisladas y sin un objetivo a largo plazo. Cumplir con las obligaciones fiscales, generar empleos y sumar al desarrollo de una región son apenas la punta del iceberg.
Los criterios ESG (Environmental, Social en Governance, por sus siglas en inglés) abarcan los elementos para volver a una empresa verdaderamente sostenible. Sin descuidar los aspectos financieros, hilan el compromiso ambiental, social, y el buen gobierno corporativo.
En este tema, conversamos con Karina Pérez, socia líder del Governance Insights Center (GIC) México, un programa impulsado por PwC México que busca acercar a las empresas a adoptar los criterios ESG y así hacer frente a los retos del mundo actual.
Karina Pérez explica que uno de los principales retos está en crear una cultura en la que todos los interlocutores gestionen acciones hacia un objetivo común. Esta tarea abarca el trabajo y la participación de todo el circuito: desde los empleados hasta los integrantes del Consejo Directivo, pasando también por los proveedores, el mercado y sus clientes.
El desarrollo sustentable está estrictamente relacionado con la innovación. El rol que juega un buen Gobierno Corporativo radica en revisar que la estrategia establecida marche por igual en todas las áreas y se traduzca en resultados factibles, señala.
ESG en los Consejos y Alta Dirección
De acuerdo con un estudio realizado por PwC y la Women Action Sustainability a 50 empresas y grandes corporativos a nivel mundial, sólo 26% cuenta con una comisión específica de sostenibilidad, que contrasta con el 48% que no destina ninguna comisión de ese tipo.
En México, Karina Pérez enuncia que uno de los principales factores que frenan la dinámica en este ámbito en las empresas nacionales es que la mayoría son familiares; de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), para 2022, estas alcanzan el 90% de las unidades de negocio en México.
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Muchas de estas entidades aún no alcanzan la madurez para establecer un gobierno o consejo de expertos en distintos ámbitos, por lo que delegan esas responsabilidades a los familiares. Aun así, sobresalen casos de éxito, donde las firmas desarrollan prácticas para lograr una cultura sostenible.
En contraste, señala que aquellas grandes empresas que figuran en la Bolsa Mexicana de Valores tienden a establecer, manejar y destinar recursos en estrategias ESG, lo que desemboca en beneficios mutuos.
Las buenas prácticas para lograr el balance, ¿cómo vamos?
Karina Pérez relata que México, en relación con países como Estados Unidos o de la región de Europa —que cuentan con una agenda más sólida—, avanza favorablemente en Gobierno Corporativo y en la ejecución de evaluaciones.
Ambas materias ayudan a identificar las áreas de oportunidad y, a partir de ello, generar tanto planes como acciones que permitan ubicar al Consejo en otro nivel.
Los paradigmas ya no son los mismos, por lo cual las grandes empresas también deberán actualizarse y tomar en cuenta temas como:
- Diversidad de género
- Perspectiva de género
- Igualdad
- Inflación y políticas cambiarias
- Medioambiente
- Crisis hídrica
PwC México será un aliado
Ante esta coyuntura, consciente de las necesidades de las empresas para consolidar un sano Gobierno Corporativo, PwC México lanzó el Governance Insights Center (GIC).
Este grupo de profesionales independientes de México y Estados Unidos provee tanto del conocimiento como de las herramientas necesarias para soportar la correcta toma de decisiones y elevar el desempeño de los consejeros. Con la finalidad de alcanzar los mejores resultados, se abordan tópicos como la evaluación proactiva de los retos actuales, la comunicación entre los interlocutores, la conexión con homólogos en el ramo para intercambiar conocimiento, y el apoyo sustantivo para que los consejos tengan mejores prácticas.