A un mes de arribar a su noveno aniversario, la empresa Soluciones Industriales de Aguascalientes (Solinda) continúa dando pasos firmes para convertirse en proveedora de la industria aeronáutica, anhelo que espera concretar este mismo año y que consolidará la expansión emprendida en agosto de 2020, con la inauguración de sus nuevas instalaciones (ubicadas en Jesús María).
Actualmente, y con la mira puesta en la internacionalización, la empresa está inmersa en el proceso de acreditación de la Norma de Aeronáutica AS9100D. Esta se encuentra en proceso de implementación por los integrantes de su propio Sistema de Gestión de Calidad, bajo la supervisión de la firma Consultoría Empresarial -misma que es reconocida por TUV Nord Group, que será la encargada de otorgar la certificación-.
Se trata de un proceso altamente desafiante que implica un mayor compromiso tanto de los directivos como de los colaboradores. Por tanto, han trabajado en ello desde hace casi un año y tendrá su culmen en noviembre próximo cuando, confían, salgan airosos de la evaluación.
Al respecto, el fundador y CEO de Solinda, Víctor González Cervantes, explica que en la obtención de la nueva certificación han invertido alrededor de 5 millones de pesos. Recalcan que esperan obtener múltiples beneficios, puesto que les daría la oportunidad de acceder a niveles en los que muy pocos tienen cabida, precisamente por los requerimientos de calidad que exige la industria aeronáutica -y que están convencidos de cumplir a cabalidad-.
“Esta certificación nos permitirán acceder a la industria aeronáutica y por ende a una diversidad de clientes potenciales. Estaremos entrando a otro giro y, si bien continuaremos en el automotriz, indudablemente el campo de acción de Solinda se incrementará”, subraya el egresado de Ingeniería Industrial en Producción del Instituto Tecnológico de Aguascalientes (ITA).
Las certificaciones no son un tema nuevo para Solinda, pues ya cuentan con la ISO 9001-2009 y la ISO 9001-2015. Estas ponen de manifiesto que laboran con la calidad necesaria para convertirse en aliado estratégico de sus clientes -para contribuir a elevar su productividad y por ende su competitividad-. También tienen en su haber el Distintivo Plata, otorgado quienes aprueban la certificación del Círculo de Proveedores.
“Nuestro principal diferenciador son las certificaciones y el know how que tenemos en maquinaria. Cuando nosotros hacemos un proyecto somos muy agresivos en los tiempos de entrega; en ocasiones traemos diferencias de hasta 50% en los tiempos de entrega en comparación con nuestros competidores, porque tenemos la maquinaria necesaria, contamos con un equipo de ingeniería muy eficiente y estamos muy robustos en metrología; además, toda la integración la hacemos en Solinda”, comenta.
El arrojo y la visión que distinguen a Solinda entre la comunidad empresarial los ha llevado a emplearse a fondo para hacer que las cosas sucedan. No es casualidad que sean una de las dos compañías finalistas (la única mexicana) que podría desarrollar un proyecto para la elaboración de cajas para pilas.
“El proyecto -de concretarse- sería por dos años y por eso nos ayuda mucho la certificación, es acceder a otro nivel. En la primera etapa las piezas (que se elaboren) se enviarían a Los Ángeles, California, y en una segunda etapa a Apodaca, Nuevo León, de manera que la producción iniciaría en agosto de este año y acabaría en 2023”, anticipa Víctor González.
Esto constituirá su incursión en la industria aeronáutica y el inicio de una nueva era para una organización que, en sus casi nueve años de vida, ha tenido un ascenso y un crecimiento vertiginosos. Solinda pasó de ser el sueño de un emprendedor (todo comenzó con una fresadora) a un consorcio de mediano tamaño que hoy cuenta con 75 colaboradores -de los cuales 25 son ingenieros en diseño y automatización-.
No obstante, e independientemente de la ejecución del citado proyecto -que implicaría un recurso de 7 millones de dólares-, el fundador de la empresa orgullosamente aguascalentense tiene muy claro que con la certificación propiciará la creación de dos divisiones: Solinda Automotriz y Solinda Aeronáutica. Para ello, se llevaría a cabo una serie de adecuaciones en las instalaciones de la planta.
Además, planean abrir oficinas en puntos estratégicos como Toluca, Puebla o Monterrey, -aunado a que se visualizan con presencia en San Antonio o en Houston, Texas, por su potencial de crecimiento-. Para ello, parten del fortalecimiento de la propia empresa a nivel interno, que deriva de la institucionalización de los procesos.
“Creo que el modelo de negocios que se implementó para seguir creciendo de la manera en que lo hemos hecho ha funcionado (…) Este año considero que vamos a facturar un 80% más que en 2019; 2020 no lo podemos tomar en cuenta, aunque sí se hizo una inversión importante porque los tiempos de crisis también son de oportunidad”, remarca el empresario -que ve siempre hacia adelante con perspicacia y sin olvidar la importancia del trabajo en equipo-.
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