por: Por: José Ángel García López, responsable de Capital Humano de Aceves Spirits
En el mundo empresarial, a menudo se cree que no hay mucho espacio para la innovación o que los modelos de liderazgo son estáticos en la sociedad moderna. Sin embargo, esto está lejos de ser la realidad. Existe una forma alternativa de dirigir empresas, una cultura diferente para gestionar a las personas y, sobre todo, una manera de empoderar a nuestros equipos otorgándoles una verdadera autonomía. Este modelo se llama sociocracia.
El término «sociocracia» no fue inventado por casualidad; su origen se remonta a Auguste Comte (1798-1857). La palabra proviene del latín «societas» (sociedad) y del griego «krátos» (autoridad), lo que significa literalmente «gobierno de socios». En este contexto, «socios» se refiere a personas con relaciones significativas e importantes.
La sociocracia busca alejar el liderazgo de los modelos autoritarios y burocráticos que a menudo prevalecen en las organizaciones. En lugar de tomar decisiones de manera jerárquica, se involucra a todos los niveles de la organización para optimizar el proceso de toma de decisiones.
¿Cuáles son las principales diferencias del modelo de gestión llamado sociocracia?
- En los equipos de trabajo participan las personas que se ven afectadas por las decisiones tomadas. Esto marca un cambio significativo, ya que muchos directivos suelen estar desconectados de la realidad de la empresa y los trabajadores. Los empleados que ejecutan las tareas tienen voz en la toma de decisiones, especialmente en asuntos relacionados con la compra de materiales y proveedores.
- Las decisiones no se toman de manera jerárquica, sino que se involucra a todos los niveles de la organización. Esto permite que cualquier empleado pueda identificar oportunidades y transmitirlas a la empresa.
- Las decisiones no se toman por consenso, sino por consentimiento. Cualquier persona puede oponerse a una idea corporativa, siempre y cuando argumente su oposición y proponga una alternativa mejor.
- Los «círculos» reemplazan los equipos de trabajo tradicionales y evitan la endogamia al reunir a talentos multidisciplinarios. Los círculos comparten información entre sí para maximizar el beneficio de cada decisión.
- Los enlaces y dobles enlaces en el modelo de sociocracia garantizan la transversalidad de la información y la transparencia en la organización.
- El liderazgo se ejerce por consentimiento, y los candidatos son propuestos por los miembros de los círculos.
La sociocracia ha llegado para quedarse en las organizaciones, ya que aborda problemas que otros modelos no pueden resolver. Es un sistema equitativo, participativo e innovador que promueve la supervivencia y la fidelización del cliente interno. Si tu organización valora a las personas, la sociocracia puede convertirse en la clave para lograr un crecimiento sostenible.