La renuncia de Gabriel Arellano a su militancia es lamentable; pero no debilita al PRI, pues la fortaleza del partido no depende de individualidades, a pesar de que era considerado como uno de los aspirantes a candidato por la gubernatura en 2016, declaró Abel Salgado Peña, delegado del Comité Ejecutivo Nacional (CEN).
“Es una decisión que lamentamos, pero también respetamos; es una decisión muy personal, el partido no puede detenerse (…) somos un partido que no tiene su fortaleza en personalidades, la fortaleza del partido está en una gran militancia, en una gran cercanía con la ciudadanía y en una gran identidad con las demandas y los reclamos sociales”, comentó Salgado Peña.
La comida que organizó Arellano, el 26 de septiembre, en la que estuvo presente el gobernador independiente electo de Nuevo León, Jaime Rodríguez, tampoco tuvo sabor a amenaza ni se vislumbra una desbandada en el partido, reafirmó el delegado del CEN.
Para enfrentar el proceso interno y seleccionar a los candidatos más competitivos, continúan las consultas con sectores, militantes, expresiones políticas e incluso actores de la sociedad que no pertenecen al partido. Hasta el momento, se han manifestado dos nombres: Miguel Romo Medina y Lorena Martínez, quien ha recibido invitación de otros partidos para ser su candidata.
“Ella sabe muy bien que tiene un lugar en el partido, que es bien ponderada por el partido y que está siendo tomada en cuenta para que podamos con lo que ella aporta, con lo que cada militante aporta, construir esa estrategia que nos permita mantener en manos del PRI el gobierno del estado de Aguascalientes”, refirió.
Respecto a la petición de cambio de dirigencia en el partido por parte de varios personajes, entre ellos Lorena Martínez, el delegado del CEN respondió que Francisco Guel Saldívar continuará en la dirigencia, pues cuenta con una prórroga hasta el proceso electoral del 12 de junio de 2016, que fue concedida por el Comité Ejecutivo Nacional.
“La única manera en la que hubiera una ausencia de una dirigencia es por una manifestación o una voluntad personal de los dirigentes de separarse del cargo, cosa que no ha sido planteada”, dijo Salgado Peña.