En un remarcable camino en los sectores industrial, inmobiliario y comercial, Roberto López ha encontrado en el trabajo constante las claves para crecer exitosamente en sociedad y posicionar a Grupo Acerero a nivel nacional e internacional.
El empresario, en exclusiva con Líder Empresarial, nos comparte su trayectoria, grandes desafíos, pero sobre todo, consejos para salir adelante.
Una trayectoria no exenta de altibajos
En contra de los deseos de su padre, pero siempre con la mirada puesta en traspasar sus fronteras —no sólo territoriales, sino personales— Roberto López emprendió un viaje a Monterrey para estudiar Ingeniería, que posteriormente cambiaría por Administración y Contaduría.
Al terminar, deseoso de seguir en tierras regias, Roberto se vió en la necesidad de “hacer la luchita el sólo”, pues su padre retiró cualquier sustento económico que le proveía, con el propósito de que este regresara a San Luis Potosí.
El empresario refiere que más allá de las universidades, su escuela fue el trabajo. “La escuela de la vida es la chamba”.
En ese sentido, su primer experiencia laboral fue en Conductores Monterrey, empresa donde aprendió aún más sobre finanzas, administración y compras.
Compaginar los aprendizajes de la vida
Como el más apegado a su padre durante su infancia, Roberto era un acompañamiento constante para su padre —pionero en el sector inmobiliario de interés social en San Luis Potosí—.
Al recibir la herencia de su padre, el empresario junto a sus hermanos se enfocaron en el sector industrial y comercial, impulsando grandes empresas en San Luis, tales como HEB, Cumens, Bimbo, Lala, Whirlpool, entre otras.
Sin embargo nuestras raíces siempre salen a flote, por lo que Roberto, impulsado por todo lo aprendido de y con su padre, incursionaron en la industria inmobiliaria, compaginando con el sector industrial y comercial.
“En el sector inmobiliario siempre hay ventas. Siempre hay personas que necesitan una casa”.
En ese valor agregado al sector inmobiliario, los hermanos López iniciaron una planta productora de acero.
Cómo llevar exitosamente las riendas de una empresa familiar
En entrevista López recuerda que al llegar de Monterrey y comenzar con la planta acerera a raíz de maquilar recortes de tubería alcanzaban cifras de cien toneladas al mes, mientras que hoy en día fabrican cien mil toneladas durante el mismo periodo.
“Un consejo que yo daría es que es necesario hacer sociedad para poder crecer. Sólo puedes hacerlo, pero en una sociedad haces más. Si a mi me preguntas, hay que tener sociedades, pero hay que tener cuidado cómo las tienes”.
Respecto a las sociedades, establece que tener reglas de minoría y de salida son fundamentales. Es decir, saber cómo salirse de la sociedad, cuánto vale tu parte y la de los demás (y respaldarlo con avalúos, utilidades, etc.).
Ante lo que surge otro consejo: institucionalizar completamente a la compañía, “que los socios participen en los consejos y comités”.
Los problemas, parte intrínseca de trabajar
Aún cuando se sigan estos consejos dentro de las sociedades y las empresas familiares, llevar las riendas de un negocio no deja de ser complicado.
“Siempre va a haber problemas cuando tengas trabajo y estés haciendo algo. Si no haces nada nunca tienes líos”. Bajo esa filosofía López enfatiza su propósito de continuar trabajando por mucho tiempo más.
Grupo Acerero: un referente en la industria nacional
La empresa potosina en ininterrumpida innovación y expansión, se especializa en el reciclaje de chatarra y la producción de placa de acero; erigiendo como el 5º productor de varilla nacional.
Su estrategia basada en la relación entre precio y demanda les ha significado gran éxito; palpable en las más de 750 mil toneladas de acero que producen al año y 420 mil de varilla, así como presencia en no sólo México, Estados Unidos, Canadá, Brasil y Noruega.
— Roberto ha logrado compatibilizar de manera casi perfecta la familia y el trabajo. En cuanto a amigos refiere, otro consejo que comparte es que los amigos se cuentan con los dedos de una mano y sobran dedos, sobre todo mientras mejor ta vaya en los negocios.
