Icono del sitio Líder Empresarial

Retorno a las estrellas, una experiencia sideral en Zacatecas

Se dice que Zacatecas tiene un cielo tan fuerte que alguna vez compitió contra la bóveda del ex monasterio de San Francisco hasta imponerse como velo y sus estrellas como luminarias. Es cierto que en la capital su brillo compite con el terrenal, pero hay un lugar a sólo 45 minutos de distancia, donde los astros son libres y los asistentes viven a su merced, el sitio arqueológico La Quemada, en el municipio de Villanueva.

La experiencia, pionera en su rama, se llama Arqueología Sideral y es organizada por la agencia zacatecana de tours Argntours desde 2017. Tras un breve descanso anuncian sus nuevas fechas a partir del 7 de marzo y cada sábado previo a la luna nueva. En la oscuridad más clara que  permite el cielo, se compaginan el sentido místico y el científico.

Te puede interesar


Bajo el cielo provinciano

La experiencia inicia con el traslado desde la ciudad de Zacatecas, se planean los horarios de tal forma que la llegada sea aún bajo el resguardo del sol. Durante el atardecer, inicia la segunda etapa del recorrido, con una caminata a través del tiempo hasta llegar a las construcciones. Luego entran los guías caracterizados como los antiguos habitantes de la región. 

Cuando anochece inicia un ritual de purificación, en el que los asistentes cambian sus energías y se preparan para el espectáculo natural. Con los ojos vendados son dirigidos hasta una zona específica, se internan en las profundidades del cosmos primero sin tener acceso a la vista. Tras la indicación, quitan las vendas de sus ojos y, ahora sí, obtienen lo que venían buscando.

Al finalizar la parte espiritual, comienza la científica, un grupo de conocedores de la astronomía, traen sus telescopios e invitan a ver con mayor claridad los cuerpos celestes. En esa fase se profundiza en los nombres de las constelaciones y se brindan datos necesarios para ubicarlas sin necesidad de artilugios sofisticados.

Como extra, se recomienda planificar el viaje considerando prolongar la estancia, basta con algunos días para conocer los alrededores, museos,  historia y gastronomía zacatecana a sol y a sombra.

Salir de la versión móvil