El gobierno de Aguascalientes pide a la federación dinero extra para concluir el hospital Hidalgo, cuando tiene pendientes de aplicar más de 100 millones de pesos.
En 2013, Aguascalientes recibió 85 millones 439.5 mil pesos del “Programa de Apoyo para Fortalecer la Calidad en los Servicios de Salud”. De ahí, destinaría 71 millones 389.5 mil pesos a “inversión pública” y 14 millones 50,000 pesos a “bienes muebles, inmuebles e intangibles”.
Hasta diciembre de 2014, Aguascalientes poseía el recurso, pero no había ejercido un peso.
Por eso, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) cuantificó en 633 millones 365,057.47 pesos el probable daño a la Hacienda Pública Federal ocasionado por Aguascalientes, Distrito Federal, Baja California, Chihuahua, Durango, Michoacán, Nayarit, Querétaro, Quintana Roo y Yucatán. Ningún estado demostró haber aplicado el dinero ni su devolución a la Tesorería de la Federación.
Además, la Secretaría de Finanzas de Aguascalientes (Sefi), que recibió el recurso y lo retuvo un tiempo, lo transfirió a la Secretaría de Salud estatal, pero sin 15.2 millones de pesos de rendimientos generados durante el periodo de retención.
Por esa omisión, la ASF calculó en tres millones 916,275.94 pesos el probable daño a la Hacienda Pública Federal, ocasionado por las secretarías de finanzas de Aguascalientes, Campeche, Colima, Guerrero, Hidalgo, Estado de México, Morelos, Nayarit, Puebla y Quintana Roo.
El monto observado por la ASF a Aguascalientes supera los 100 millones y medio de pesos, y equivale a una tercera parte del presupuesto necesario para terminar el nuevo Hospital Hidalgo, según lo difundido por gobierno del estado en octubre del año pasado.