Las remesas se han convertido en una de las principales fuentes de ingresos para México. Nuestro país desplazó a China como el segundo receptor a nivel mundial, al captar 51 mil 585 millones de dólares (mdd) durante 2021.
El Anuario de Migración y Remesas de BBVA Research reveló que en ese mismo año, el dinero enviado del extranjero representó el 4% del PIB.
En los primeros ocho meses de 2022, la economía mexicana recibió 37 mil 934 mdd por concepto de remesas (un aumento de 15.2% respecto al mismo periodo de 2021).
¿Qué ha acelerado el envío de dinero a México?
Incluso antes de la crisis sanitaria, las remesas mostraron una tendencia al alza mientras que otras fuentes de ingresos desaceleraron —como la Inversión Extranjero Directa y las exportaciones petroleras–—.
Para Merari Picazo, especialista en Migración Laboral para la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la pandemia permitió, de manera multifactorial, remarcar un mayor flujo de dinero dirigido a familias residentes en México.
Uno de los factores clave fue el no cerrar las actividades esenciales como la agricultura y la industria alimenticia, lo que permitió mantener el trabajo para los inmigrantes mexicanos. En tanto, la falta de fuerza laboral en estas y otras actividades permitió la entrada de colaboradores informales con contratos masivos y temporales.
Para Ana Gutiérrez, coordinadora de Comercio Exterior y Mercado Laboral del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), la aceleración económica del vecino del norte y los estímulos de su gobierno para mitigar los efectos de la pandemia beneficiaron a la población migrante.
“Las familias de migrantes tenían un ingreso extra a pesar que la economía estaba pausada, esto permitió que aumentara el envío de remesas tras acceder a más apoyos monetarios”, destacó la especialista del IMCO.
Añadió que ahora no sólo las familias migrantes envían dinero a México, sino que también lo hacen quienes pertenecen a la segunda y tercera generación.
Por su parte, Picazo señaló que este fenómeno también se explica desde la solidaridad de los migrantes con los propios connacionales. Ellos echaron mano de sus ahorros para contrarrestar la pérdida de empleo ocasionada en la crisis sanitaria.
“Al conocer las expectativas de la economía mexicana, los migrantes se vieron incentivados a enviar más remesas si tenían la capacidad de hacerlo”, agregó Gutiérrez.
Remesas, IED o petróleo, ¿qué aporta más?
Con cifras del Banco de México (BANXICO) y la Secretaría de Economía (SE) analizamos el flujo de remesas en México a partir de 2009, año posterior al estallido de la crisis financiera global que ocasionó una profunda contracción en el envío de dinero —ante un bajo nivel de empleo de inmigrantes mexicanos en Estados Unidos—.
De tal forma, a finales de 2012, se presentó una reactivación de los ingresos por remesas hasta alcanzar máximos históricos en 2019, 2020 y 2021.
| Año | Remesas totales (mdd) |
| 2009 | 21,306.3327 |
| 2010 | 21,303.8820 |
| 2011 | 22,802.9716 |
| 2012 | 22,438.3220 |
| 2013 | 22,302.7510 |
| 2014 | 23,647.2838 |
| 2015 | 24,784.7726 |
| 2016 | 26,993.2816 |
| 2017 | 30,290.5451 |
| 2018 | 31,409.6042 |
| 2019 | 36,438.7581 |
| 2020 | 40,604.5538 |
| 2021 | 51,585.8671 |
El dato anual más reciente reveló que las remesas recibidas en 2021 aumentaron en 27%; es decir, ingresó un extra de diez millones de dólares respecto al año anterior. Dicho monto mostró la resiliencia del efectivo ante la crisis derivada de la pandemia por COVID-19.
Incluso antes de la crisis sanitaria, las remesas superaron a la Inversión Extranjera Directa (IED). En 2019, el dinero proveniente del extrajero fue superior en dos mil 44 mdd a la IED de aquel año; en 2020 lo fue en doce mil 417 mdd, y en 2021 casi la duplica.
Igualmente, durante el primer semestre del 2022 ambos componentes registraron montos similares.
Las remesas también podrían competir con el saldo de las exportaciones petroleras. De hecho, en 2014 y 2015 fueron mayores (cuatro mil 822 mdd y mil 685 mdd, respectivamente) al monto acumulado para este tipo de mercancías. Seis años después se reportó una tendencia similar, ya que las remesas volvieron a superar a las exportaciones petroleras en 20 mil 754 mdd.
