Desde el año pasado se escuchan rumores de una posible recesión en México, Estados Unidos, y otros países alrededor del mundo; sobre todo debido a las dificultades económicas experimentadas debido a la pandemia por COVID-19, los conflictos geopolíticos en Europa y el crecimiento acelerado de la inflación.
Así pues, los bancos centrales como Banxico y la FED han debido tomar decisiones difíciles en su política monetaria para frenar en medida de lo posible una recesión en sus países. Sin embargo, el quiebre de instituciones financieras importantes alrededor del mundo, y la prevalencia de la inflación hacen difícil imaginar un panorama económico positivo para el 2023.
¿Qué es la recesión?
La recesión es una fase del ciclo económico que se caracteriza por una disminución sostenida de la actividad económica en un país o región. Esto se traduce en una disminución del empleo, la producción, el consumo y la inversión, entre otros indicadores.
Las causas de una recesión pueden ser diversas, desde factores externos como crisis financieras internacionales o desastres naturales, hasta factores internos como políticas económicas deficientes o crisis institucionales.
Las consecuencias de una recesión pueden ser graves y duraderas para los países. Entre las principales consecuencias se encuentran:
- Aumento del desempleo: La disminución de la actividad económica en un país conduce a la pérdida de empleos, lo que genera una disminución del poder adquisitivo y de la calidad de vida de la población.
- Disminución del consumo: Con menos empleo y menos ingresos, los consumidores tienden a gastar menos, lo que afecta la producción y la rentabilidad de las empresas.
- Aumento de la pobreza: La disminución de la actividad económica y el aumento del desempleo pueden llevar a un aumento de la pobreza y la desigualdad.
- Dificultades para el sector empresarial: Las empresas enfrentan dificultades para mantenerse a flote y cumplir con sus obligaciones financieras, lo que puede conducir a la quiebra y la disminución del empleo.
- Dificultades fiscales: La disminución de la actividad económica también puede afectar las finanzas públicas, ya que disminuyen los ingresos fiscales y aumentan los gastos en programas sociales.
En resumen, la recesión es un fenómeno económico complejo que puede tener graves consecuencias sociales y económicas en los países. Por esta razón, es importante que los gobiernos implementen políticas económicas adecuadas para prevenirla o enfrentarla de manera efectiva.
México y otros países ¿Al borde de la recesión?
El Foro Económico Mundial informó que el 20% de los economistas expertos prevén una recesión global en el 2023. Así, muchos consideran que en Europa y Estados Unidos la guerra entre Ucrania y Rusia incremente las tasas de interés, ocasionando que las políticas monetarias se intensifiquen, tal como ocurrió recientemente cuando EUA incrementó en 25 puntos base su tasa de interés.
Además, el Foro Económico también pronostica que el crecimiento económico del 2023 sea menor al del 2022, posicionándose en el 2.7% mundial. Con esto en mente, los especialistas pronostican incrementos en la inflación importantes en todo el mundo: 24% lo hacen en Estados Unidos; 45% en Latinoamérica y el Caribe; 57% en Europa; y 42% en Asia Central.
Con esto en mente 63% de los expertos esperan una recesión mundial en el 2023 y el 100% pronostica que los problemas geopolíticos sigan realineando la política económica mundial. Así pues se espera que en este año se reduzca la demanda y se incrementen los costos de los préstamos.
Además, las empresas deberán reducir costos recortando sus costos operacionales, realizando despidos masivos y optimizando sus cadenas de producción. Lo cual se ha visto reflejado en el cierre de bancos alrededor del mundo, despidos en algunas de las empresas más importantes como Google o Twitter; así como en la popularización del nearshoring.
Para el caso de México, Forbes pronostica que la recesión llegará con retraso, pues se espera un crecimiento de 0.3% en el PIB este 2023. Aunque para el 2024 no se podrá llegar al crecimiento meta de 1.5%, pues los expertos esperan que avance 0.6% solamente. PArticularmente esto se debe a que el mercado estadounidense se desacelerará, impactando las remesas y el comercio en el país.
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