Este viernes, Gabriel Boric asumió la Presidencia de Chile en una ceremonia en la ciudad costera de Valparaíso, quien con tan sólo 36 años se convirtió en el mandatario más joven en la historia del país sudamericano.
Sin fallar a su estilo, el progresista acudió a la ceremonia en el salón de honor del Congreso sin corbata, tal cuál lo hizo cuando juró como diputado en 2014 y 2018.
La elección de Boric, quien denomina a su gobierno como feminista, supone un cambio político importante a su predecesor Sebastián Piñera y a los gobiernos anteriores que habían mantenido políticas centro-izquierda y centro-derecha desde que Chile retorno a la democracia en 1990.
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El nuevo gabinete, liderado por la ministra del Interior, Izquia Siches, está compuesto por 14 mujeres y 10 hombres, muchos de ellos, como Giorgio Jackson y Camila Vallejo, que junto con Boric dirigieron las protestas de 2011 y 2012 para exigir reformas educativas. Entre su equipo también se encuentra Maya Fernández, quien ocupa el cargo bastante simbólico de Ministra de Defensa, pues es nieta del ex presidente Salvador Allende, quien fue derrocado por el ejército en 1973.
Diversos analistas han coincidido en que el gobierno de Boric se enfrentará a grandes presiones populares, después de que la ciudadanía se enfrentó a un estallido social en 2019 y esperan ver cumplidos los cambios prometidos.
Sumando a que el país atraviesa por un escenario económico y político complejo, pues Chile se enfrenta a una inflación histórica nunca antes vista en 10 años y un proceso constituyente en marcha para cambiar la Constitución que actualmente rige en el país y que es herencia del régimen de Augusto Pinochet.