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¿Qué tanto está innovando Aguascalientes? El apunte

Por segunda ocasión, el Centro de Análisis para la Investigación en Innovación (CAIINNO), publicó su Índice Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (2018), en el que a sólo tres años de su primer edición (2015), Aguascalientes cambió la jugada en varios indicadores. En su mayoría, estos cambios fueron positivos, aunque las áreas que vinieron a la baja resultan preocupantes y dejan mucho por trabajar.

 

Indicadores del ÍNDICE Posición 2015 Posición 2018 DIFERENCIA Primero Último
Contexto general de la entidad 9 8 1 Cdmx Oaxaca
Propiedad industrial 9 8 1 Cdmx Guerrero
Inversión pública y privada 19 17 2 Cdmx Tabasco
Inclusión 32 18 14 Edomex Coahuila
Emprendedurismo y negocios 29 7 22 Puebla Cdmx
Empresas innovadoras 9 10 1 Cdmx Baja California
Educación superior 12 13 1 Cdmx Chiapas
Tecnologías de la información 5 7 2 Cdmx Chiapas
Producción científica 27 18 9 Cdmx Guerrero
Educación básica 8 18 10 Cdmx Oaxaca
Infraestructura material e intelectual 5 16 11 Cdmx Oaxaca
Género 13 32 19 Quintana Roo Aguascalientes

Hablando de los buenos resultados, Aguascalientes se ubicó en el octavo puesto nacional como impulsor de la innovación, escalando un lugar respecto a la edición previa. Esto se debió a que la entidad tuvo avances en los indicadores de:

En lo que respecta a los resultados no tan buenos dentro de esta evaluación, Aguascalientes fue a la baja en indicadores como: Empresas innovadoras (del 9 al 10), Educación Superior (del 12 al 13) y Tecnologías de la Información (del 5 al 7). Pese al descenso, la entidad mantuvo un buen posicionamiento en los tres indicadores aunque en lo que respecta a Educación Básica e Infraestructura se pasó de los lugares 8 y 5 a los 18 y 16 respectivamente.

Pero el indicador más preocupante es el relativo al género, que corresponde a las oportunidades que las mujeres tienen para acceder a programas de divulgación científica, innovación o desarrollo de tecnología. En esta área, Aguascalientes se ubicó como el último lugar nacional (32), lo que representa un descenso de 19 lugares después de ocupar el puesto 13 durante 2015.

El reto de toda una nación

México es un país que ha tratado de no quedarse atrás en ciencia, tecnología e innovación (CTI), sin embargo, de acuerdo con los resultados obtenidos en fuentes como el índice de innovación de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, el proceso ha sido muy lento. Para el CAIINNO la participación de los estados resulta clave, ya que el desempeño de todos impacta directamente en el resultado como país.

A diferencia de otros índices de innovación que existen en el mundo, desde la primera versión del #INCTI-CAIINNO en 2015, se diseñó con una perspectiva social pues se consideró que un país como México, con los retos que tiene en materias como género y pobreza, la CTI también debería ser una herramienta para mejorar las condiciones sociales del país, además, de que no se podría hablar de mejoría en la CTI cuando se sigue teniendo una brecha tan grande en temas como la participación de las mujeres.

Atendiendo lo que para CAIINNO deben ser elementos que permitan alcanzar una Economía del Conocimiento, pero con el enfoque social deseado, se revisaron las recomendaciones e indicadores que consideran organismos como el Foro Económico Mundial, la Conferencia de las Naciones Unidas Sobre Comercio y Desarrollo, y la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual.

La mexicana Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de las Naciones Unidas, destacó que en América Latina y el Caribe, persisten brechas entre las áreas urbanas y las rurales, e importantes brechas de género que, entre otros, limitan el acceso de las mujeres a carreras científicas.

Afirmó que los Objetivos de Desarrollo Sostenible, representan una oportunidad, pero solo si nuestras sociedades, sistemas educativos y la forma en que generamos un nuevo pacto social entre los gobiernos, el sector privado, la academia y la juventud, cambian el paradigma a través del cual abordamos los problemas tecnológicos. “Necesitamos avanzar más rápido en materia educativa, pero pensemos en qué tipo de educación necesitamos. Debemos pensar si nuestros sistemas educativos están listos para los desafíos futuros”.

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