De los 189 países evaluados por el Banco Mundial en el ámbito de qué tan sencillo es hacer negocios o abrir una empresa local en cada uno, México se posicionó, en 2015, en el lugar 38.
Dicha medición se refiere a los negocios en el sector privado; sin embargo, el Banco Mundial se dedica a explorar otros ámbitos como el público, financiero, agrícola, de salud, entre otros.
La calificación de México aumentó cuatro puntos a comparación de 2014, cuando ocupó el lugar 42.
Los países que ocupan las 5 primeras posiciones en este ranking son: Singapur, Nueva Zelanda, Dinamarca, República de Corea y Hong Kong. Mientras que los últimos son: República Centroafricana, Venezuela, Sudán del Sur, Libia y Eritrea. De América Latina, México tiene la calificación más alta.
La medición se hace tomando en cuenta, de forma general, los siguientes aspectos:
- Los procedimientos oficiales que necesita un empresario para abrir una empresa (licencias, permisos) y operarla formalmente.
- Qué tanto tiempo y dinero le toma a una constructora obtener los permisos para construir.
- Si es difícil o no obtener los permisos para conectarse al suministro eléctrico.
- Qué tan sencillo es y qué se necesita para que una empresa pueda adquirir una propiedad de otra, transferir títulos de propiedad para expandir negocios y garantía de préstamos.
- Lo que se necesita para obtener un crédito.
- La protección de inversionistas minoritarios.
- Cuánto paga de impuestos una empresa de tamaño medio.
- Tiempo y costos del proceso logístico de exportación e importación de bienes, es decir, el comercio transfronterizo.
- El tiempo y costo para resolver una disputa comercial a través de tribunales de primera instancia local.
- Qué tan rápido y costoso es resolver procedimientos de insolvencia de las empresas.