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¿Qué tal andan las Pymes en el uso de las TIC?

Si un negocio pequeño o mediano no incorpora las tecnologías de la información (TIC) a sus procesos, ¿qué puede ir mal? O al contrario, si las implementa, ¿en qué le beneficia? Un investigador de la Universidad Autónoma de Aguascalientes nos habla sobre ello.

Las TIC en las empresas sirven para tomar buenas decisiones aunque, muchas veces, no están al alcance de todas las organizaciones. Debido a problemas de financiamiento, las Pyme son las que menos pueden adquirirlas.

El doctor en Administración e investigador de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, Luis Aguilera Enríquez, se ha dedicado doce años a investigar la influencia de las tecnologías de la información en las Mipyme del estado y ha encontrado un uso reducido en la mayoría de ellas, sobre todo en los procesos productivos. El motivo principal de esto es la falta de recursos para implementarlas.

Solo 38 por ciento de las pequeñas y medianas empresas cuentan con tecnologías de la información, dice Aguilera Enríquez, y en las micro no se llega ni a 23 por ciento. No todas tienen los fondos necesarios para adquirir sistemas como el RPM (Reporting Production Management), mediante el cual reciben información sobre inventarios, materia prima en proceso, productos terminados, facturación y cuentas por cobrar.

El uso de este tipo de tecnología es vital para las Pyme, considera el investigador, pues a muchas les hace falta hacer más eficientes sus procesos para disminuir costos y ser más competitivas en un mercado globalizado.

Tener acceso a las TIC en procesos productivos es costoso, menciona Luis Aguilera, y los negocios, sobre todo los micro y pequeños, en la mayoría de las ocasiones tienen que descapitalizarse para adquirirlas y además capacitarse en su uso.

Aunque existen fondos federales y estatales que pueden apoyarlos, pocos empresarios saben cómo acceder a ellos, dice el doctor en Administración. De hecho, 90 por ciento de los microempresarios desconocen la existencia de esos recursos. Otra dificultad con la cual se topan se presenta al solicitar un préstamo, pues el banco pide presentar activos como respaldo que no todos tienen.

Aguilera Enríquez considera que las políticas públicas no están encaminadas a desarrollar software o despachos que ayuden a las organizaciones a implementar las TIC.

“Las tecnologías deben ser de punta, tener los software indicados para el proceso productivo y para los sistemas de información en la empresa. Creo que esto tiene que llegar ya a México porque si no, la obsolescencia alcanzará su límite en cinco o diez años”.

Las ventajas de incluir las TIC en las compañías son varias. En primer lugar, se disminuyen costos de producción y los procesos se hacen más eficientes. Además, se tiene mayor control de los procedimientos, desde materia prima hasta inventarios y cobranza, lo cual hace que se tomen mejores decisiones.

“Son un instrumento para lograr el rendimiento y la competencia. Si yo le anexo eso a todas las áreas de una empresa y un sistema de información adecuado para tomar decisiones, como consecuencia tengo que ser competitivo”.

Para lograr la tecnificación completa en el ámbito empresarial se debe apoyar a las Mipyme, considera el investigador, impulsar a que desarrollen software propios, ajustados a sus necesidades específicas como si fueran trajes hechos a la medida. El porcentaje de negocios que los desarrollan de esta forma está cerca del 32 por ciento, aunque en esta medida se cuentan a las grandes firmas, las cuales sí tienen recursos y personas dedicadas exclusivamente a ello.

Las grandes compañías están absorbiendo a las pequeñas y medianas, comenta Luis Aguilera. Hace 20 años, 85 por ciento pertenecía a la industria y 15 por ciento a servicios, hoy se ha invertido la cifra. Con la competencia de países como China, Estados Unidos, Alemania y Japón, será necesario fortalecer a las Pyme del estado. Los apoyos gubernamentales tendrán que enfocarse a la modernización, pues si la tecnología y competitividad aumentan en los negocios, también lo harán los empleos.

Por eso, asegura, se debe tecnificar e institucionalizar a las pequeñas empresas para que, con los sistemas de información adecuados, se fortalezcan y puedan competir con las extranjeras.

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