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¿Qué sucede cuando un aguascalentense envejece?

Los adultos mayores ocupan un importante segmento en la sociedad de Aguascalientes, al traducirse a 135 mil 679 habitantes con 60 años o más, que representan el 10 por ciento de la población total en el estado.

Esta pequeña gran parte de la comunidad aguascalentense vive en mejores condiciones que la media nacional. Sin embargo, hay muchos aspectos por los que aún se puede considerar un sector con baja calidad de vida.  

De acuerdo con datos del INEGI, sólo el 28.3 por ciento de este segmento pertenece a la Población Económicamente Activa (PEA). Del resto, sólo el 30 por ciento está pensionado, por lo que siete de cada diez habitantes de estas edades no recibe una manutención para su vejez.

Brecha de género, constante en la vejez

La balanza de este sector desfavorece mayormente a las mujeres. La proporción entre jubilados y jubiladas es de tres a uno en favor de los varones, lo que quiere decir que solamente alrededor del 7 por ciento de ellas recibe una pensión.

Como consecuencia, al llegar a su vejez, las mujeres mayores se dedican principalmente a las labores del hogar, que en comparación con los varones, es una actividad con una tendencia hasta 35 veces mayor para ellas que para ellos.

La brecha entre hombres y mujeres mayores en el estado se debe principalmente a dos temas: escolaridad y sociedad.

En el primer aspecto, INEGI muestra que el 23.7 por ciento de los adultos mayores varones en Aguascalientes tienen estudios en educación media superior o superior. En contraparte, sólo el 16 por ciento de las mujeres en esta edad cuentan con esa misma escolaridad, una diferencia superior a los 7 puntos porcentuales entre ambos sexos.

El estilo de vida que los adultos mayores tuvieron durante su juventud fue de mucha influencia para los resultados que se tienen hoy en día. La dedicación de las mujeres al hogar y de los hombres al trabajo fue un ejercicio social que se dio por sentado para las generaciones actuales de adultos en senectud.

Para poder seguir estudiando, había que salir del terruño y esto aplicaba con más facilidad para los hombres que para las mujeres. Los números para los próximos adultos mayores serán diferentes, particularmente más equilibrados.

Adultos mayores, en su mayoría, vulnerables

En uno de cada cuatro hogares de Aguascalientes vive al menos un adulto mayor de 60 años, donde muchos de ellos aún juegan el rol de jefes de hogar, una tarea difícil de desempeñar dado las limitaciones físicas. Empero, las abuelas y abuelos continúan en su mayoría al frente del hogar, incluso haciéndose cargo de nietos y adultos que requieren cuidados hasta edades muy avanzadas.

En más del 10 por ciento de los hombres y del 6 por ciento de las mujeres en estas edades se presentan limitaciones físicas y mentales de consideración, particularmente entre el grupo de 85 años y más.

Además, el 15.7 por ciento de los hogares unipersonales, es decir en donde se vive solo, son ocupados por adultos mayores, generalmente por razones ajenas a su voluntad y sometidas a una prolongada soledad.

Es por ello que “cuidar”, es uno de los verbos que tenemos que aprender como sociedad en los próximos años. Si sumamos a los más de 10 mil adultos mayores de 84 años con los 176 mil infantes que tenemos, de entre los cero y los seis años, se tienen más de 184 mil personas en edad de ser cuidados, lo que representa una responsabilidad como estado para atender las necesidades de prácticamente uno de cada siete habitantes de Aguascalientes.

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