El cortisol es una hormona esteroidea que se produce en la glándula suprarrenal. Esta hormona es comúnmente conocida porque se genera como respuesta al estrés y a un nivel bajo de azúcar en la sangre. Aunque también es responsable de metabolizar grasas, proteínas y carbohidratos.
Sin embargo, como cualquier otra sustancia secretada con el cuerpo, el humano produce cortisol a niveles moderados a lo largo del día para cumplir sus funciones, sin embargo, generalmente producimos excesos de esta hormona cuando estamos estresados o en alerta, nos sentimos amenazados o sentimos miedo e incertidumbre.
¿Qué efectos adversos tiene esta hormona?
Recientemente, muchos han observado que las personas tienen niveles más altos de cortisol de lo que se considera normal. Lo que puede traer efectos adversos a la salud y la calidad de vida de las personas. Algunas de las consecuencias más importantes del incremento de esta sustancia son:
- Contrarresta la insulina: El exceso de la hormona del estrés contrarresta la insulina, lo que puede generar hiperglucemia. Esto, a la larga, puede provocar diabetes.
- Pérdida de colágeno: El colágeno es una proteína que se encuentra en el pelo, la piel, las uñas, los huesos y otras partes del cuerpo. Gracias a esta proteína podemos reforzar nuestros huesos, tener una piel jóven y curar nuestras heridas de manera rápida. Sin embargo, se ha observado que el cortisol inhibe al colágeno.
- Osteoporosis: Debido a la inhibición de colágeno y otras alteraciones del organismo, las personas con altos niveles de esta hormona pueden padecer osteoporosis.
- Aumento de peso: De la misma manera, los niveles altos de cortisol pueden ocasionar un aumento de peso en la persona.
Además de esto, es posible desarrollar cansancio crónico y tener efectos adversos en el funcionamiento cerebral y el humor.
¿Cómo se pueden nivelar los niveles de cortisol?
Al ser una hormona, existen diversos hábitos que podemos practicar para regular nuestros niveles de cortisol y mantenerlos en sus límites normales. Algunas de las cosas que podemos realizar para reducir la secreción de la hormona del estrés, son:
- Hacer ejercicio: Aunque el ejercicio aumenta parcialmente nuestros niveles de cortisol. Al practicarlo regularmente reforzamos el patrón natural de la hormona. Se recomienda realizar actividad física en la mañana.
- Meditar: Los científicos han comprobado que practicar actividades como la meditación, el Yoga, el Tai Chi e incluso los masajes relajantes pueden bajar los niveles de cortisol.
- Aprender a manejar el estrés: Encontrar maneras para reducir el estrés, así como las relaciones poco conflictivas son maneras en las que se puede prevenir padecer de niveles crónicos de cortisol elevado.
- Evitar comidas altas en azúcar: Se ha comprobado que consumir comida alta en azúcar procesada y grasa aumenta los niveles de cortisol. Por eso se recomienda mantener una dieta balanceada, tomar probióticos y/o comer chocolate oscuro.
- No tomar café durante las tardes: Si bien el café estimula la producción de la hormona del estrés, los niveles de esta aumentan durante la mañana, por lo que su consumo no presenta un problema. Sin embargo, tomarlo durante la tarde afecta el patrón normal de esta sustancia.
- Evitar el consumo de alcohol: Consumir alcohol eleva los niveles de cortisol en cualquier momento. Particularmente los expertos recomiendan no tomarlo en períodos de mucho estrés, cuando la hormona ya se encuentra elevada.
- Dormir bien: Tener un descanso profundo de alrededor de 7 horas permite que los niveles de cortisol se regulen.
- Convivir con tus mascotas: Se cree que un período de 10 minutos acariciando un perro, gato u otra mascota reduce significativamente los niveles de la hormona del estrés en el cuerpo.
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