3 consejos fiscales para 2016
La caída de los precios del petróleo te afecta más directamente de lo que crees. Al reducirse tan drásticamente la principal fuente de ingresos de la administración pública federal, los contribuyentes serán los encargados de tapar el boquete presupuestal.
Desde el punto de vista del especialista Oscar Reyes Rivera, la política fiscal de 2016 es más severa. Y eso se refleja principalmente en tres medidas:
- Fiscalización severa a personas físicas. A través de la liquidación o el cambio de domicilio, las sociedades mercantiles pueden eludir al SAT. Así, la persona física es el activo más fuerte que tiene para cobrar impuestos porque no puede desaparecer. El uso de tarjetas de crédito, de débito y manejo de cuentas de cheques será sujeto a una fiscalización muy severa.
- Declaración de intereses sobre cuentas de cheques. La gente piensa que si tiene cuenta de cheques la van a fastidiar; sin embargo, eso solo sucede si se tienen intereses. Quien reciba intereses debe declararlos y si no lo hace, le van a cobrar el impuesto.
- Adiós a los prestanombres. El SAT interrogará al representante legal que haga el alta de la sociedad mercantil, quien además será el responsable fiscal, civil y penal de cualquier manejo fuera de la ley. La fiscalización se extiende a las cuentas abiertas en el extranjero y el SAT ya recibió el primer GB de información de EUA para hacer el cruce de información.
Soluciones
A pesar del rigor con el que Hacienda busca ampliar la base de contribuyentes, no hay que entrar en pánico. Reyes Rivera propone tres estrategias completamente legales con las cuales empresarios y personas físicas pueden estar tranquilos.
- Incursionar en el agro. El ramo tiene muchas facilidades de manejo de impuestos porque posee muchas extensiones todavía. Puede ser un nicho de oportunidad para los empresarios que están en el ámbito comercial y puedan incursionar en el sector primario. Al hacer esa combinación, se tendrá una baja real del pago de impuestos.
- Evitar abrir cuentas de cheques a nombres de otros. Abrir cuentas a nombre del cónyuge, hijos, hermanos, etcétera; podría meterlos en problemas, si no pueden justificar el origen de esos ingresos.
- Acercarse a especialistas. Con la entrada en vigor de la Ley Antilavado, otras normas y tratados que permiten la fiscalización de cuentas en el extranjero, lo mejor es contar con un despacho fiscal de cabecera.
“Si no se asesoran bien, pueden caer en una discrepancia fiscal involuntariamente. Muchos empresarios de México están en discrepancia de forma involuntaria porque acuden siempre al precepto que ya sabemos: aquí en México todo se vale, todo se puede; pero ya no es así”, advierte Reyes.