Escrito por Mario Montañez, Banca Privada de Grupo Financiero Monex.
El pasado 24 de Junio el Banco de México en su reunión de Política Monetaria, de forma un tanto inesperada incrementó su tasa de referencia de 4% a 4.25%; decisión que se tenía esperada hasta dentro de unos meses; ya que la inflación ha estado por encima del objetivo de 3%; además del tono de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) más agresivo en cuanto a sus proyecciones de subida de tasa en los próximos años; puso sobre la mesa una decisión que de alguna forma va en sintonía con las decisiones de algunos otros Bancos Centrales en el mundo, tal y como lo mencionamos incluso en el artículo de la semana pasada.
No obstante, ¿qué consecuencias muestra el incremento de tasa realizado por Banxico?
- Contener la inflación creciente y proteger el poder adquisitivo de los mexicanos. No olvidemos que ese es el principal mandato de todos los bancos centrales.
- Ajuste en las tasas del mercado de deuda; es decir, un impacto en las tasas de cetes y bonos de corto y largo plazo.
- Ajuste en la Tasa de Interés Interbancaria y de Equilibrio (TIIE), la cual al momento de escribir estas líneas habría pasado de promediar 4.28% a 4.31%, por lo que toda obligación crediticia de tasa variable se vería incrementada.
- Apreciación del peso, ante la debilidad global del dólar mostrada en el índice DXY; el aumento de tasa hace atractivo el mercado de deuda mexicano ante las tasas negativas de algunos países avanzados.
En otro orden de ideas, el anunciado incremento de tasa tuvo una respuesta positiva por parte del público inversionista lo que abonó a que el dólar se depreciara frente al peso pasando de cotizar de entre $20.60 hasta llegar a un promedio de $19.80 en un lapso de 7 días posterior al comunicado de la FED. Además de lo anterior, estas son buenas noticias para los ahorradores e inversionistas puesto que verán un aumento en la tasa de interés que reciben en todos aquellos instrumentos considerados “conservadores o de deuda”. Aunque, por el contrario, para aquellos deudores o empresas, no son tan buenas noticias dado que verán un aumento en el costo de su deuda con tasa variable, es decir, pagar un crédito actual o solicitar uno será un tanto más costoso.
Por lo anterior, se hace imperativo definir estrategias financieras para la empresa y/o para el patrimonio, con el objeto de cubrir el riesgo cambiario, el poder adquisitivo, así como el costo de la deuda, y explorar nuevas fuentes de financiamiento, puesto que no se descartan más incrementos de tasa antes del término de este año.
Por ejemplo, algunas ideas para rebalancear su estrategia financiera:
- Invertir el excedente de su tesorería en instrumentos de deuda de corto plazo que ahora verán un pequeño incremento en la tasa de interés que recibirían anteriormente.
- Pactar una cobertura de tipo cambiario si mantienen obligaciones en divisa extranjera, aprovechando la fortaleza del peso, con lo que se mantenga en rangos adecuados la utilidad de la empresa.
- Acordar alguna cobertura de tasa para cubrir todas aquellas fluctuaciones de ésta, o bien reestructurar el costo de la deuda actual por si ésta fuera incluso más costosa que la del mercado,
- Considerar el factoraje y/o arrendamiento como una fuente de financiamiento alterna que permite obtener liquidez en un escenario complejo.
Si tienes alguna situación particular como las descritas, acércate y conoce las distintas alternativas de la mano de los expertos de Grupo Financiero Monex. Ellos saben cómo hacer que tu dinero trabaje a través de productos como:
- Coberturas de Tipo de Cambio.
- Coberturas de Tasas como: Swaps de tasas de interés, Cross Currency Swaps, Cap, Floors.
- Notas Estructuradas: Productos con tasas de interés competitivas para tesorería de empresa.
- Arrendamiento Puro.
- Factoraje Internacional.