Durante el 28, 29 y 30 de enero el Institute for the Future of Education (IFE) organizó la IFE Conference 2025 que en esta ocasión giró en torno a la inteligencia artificial (IA) en educación.
Esta se llevó a cabo en el campus Monterrey del Tecnológico de Monterrey y tuvo 4 mil 759 asistentes de 40 países. Cabe mencionar que 3 mil 965 fueron participantes presenciales, mientras que 794 fueron participantes virtuales.
El evento, antes conocido como el Congreso Internacional de Innovación Educativa, es uno de los más importantes en su rama en el mundo de habla hispana.
En esta ocasión se dieron cita expertos que intentaron responder a dos preguntas: ¿Cómo será la integración de la inteligencia artificial (IA) en la educación?, y ¿Cómo cambiará la formación educativa en el futuro?
«El IFE Conference 2025 se centra en los complejos desafíos que enfrenta el sector educativo al adoptar pedagogías innovadoras y tecnologías avanzadas, incluida la inteligencia artificial”, dijo Michael Fung, presidente de IFE Conference.
A continuación se presentan algunos puntos que se resaltaron durante el IFE Conference 2025:
Prevalecen expectativas ante el potencial de la IA
Michael Fung y Paulo Blikstein, director del Research Lab del IFE, reflexionaron sobre las promesas de la IA en la enseñanza y su potencial real, concordando en que prevalece un sentimiento de emoción en torno a su constante evolución.
De acuerdo con Fung, la emoción que existe alrededor del uso de la IA en el ámbito educativo puede dividirse en cuatro ejes centrales:
- Su potencial para sobrepasar a la inteligencia humana.
- La posibilidad de que esta sea un reemplazo inminente a los docentes.
- La idea de que este tipo de tecnologías son capaces de solventar cualquier problema.
- Las capacidades de la IA para disminuir brechas informativas.
A pesar de que los ponentes reconocieron que hay expectativas exageradas alrededor de lo que puede hacer esta tecnología, enfatizaron que existen usos realistas que están transformando e innovando el paradigma actual.
Imprescindible priorizar el factor humano
En la misma línea, Blikstein ve poco realista que el docente sea reemplazado por la IA. Esto, parte del desconocimiento de lo que realmente hace un profesor y el impacto humano que tiene sobre el alumno.
Sin embargo, también recalcó que si se aprovecha correctamente la tecnología, tanto por los interesados como por los docentes capacitados en su uso, puede aumentar el interés en las aulas.
De la misma forma, puntualizó que se debe priorizar al ser humano en el proceso. Esto, debido a que una persona es la que maneja las herramientas y puede ver qué se está haciendo y cuidando la seguridad.
IA generativa incide en democratizar la educación
A su vez, Amy Ogan, de la Universidad Carnegie Mellon, explicó que como parte del Gartner’s Hype Cycle de la innovación, las personas son capaces de evolucionar sus expectativas más allá de los beneficios esperados a corto plazo y enfocarse en los beneficios reales de la misma.
En este caso, el último punto del ciclo es el que permite encontrar las formas en que una nueva tecnología puede tener éxito. Y, al mismo tiempo, transformar una determinada área con soluciones que se adapten a las necesidades y no a las ilusiones.
“LaIA generativa incide en democratizar la educación dentro de algunos contextos. Pero todavía se queda corta en el ofrecimiento de educación en línea, gratuita y de alta calidad para todos”, reflexionó Fung.

Explorar sinergias entre humanos e IA
Si bien la IA puede acelerar procesos de revisión y monitoreo del desempeño de estudiantes, aún requiere de un monitoreo constante por parte de los profesores.
Del mismo modo, integrar el uso de herramientas de IA al aula prepara a los alumnos en el desarrollo de competencias para el futuro. Mientras, Ogan incluso aseguró que puede promover el trabajo grupal.
Propiciar la colaboración entre actores internacionales
Aumentar y facilitar la adopción de la IA generativa, así como, proveer consejería sobre el uso responsable de la IA son objetivos comunes en la agenda tanto de actores globales como de instituciones educativas.
Asimismo, el Carles Abarca, vicepresidente de Transformación Digital destacó la necesidad de proveer recursos y capacitación a profesores, crear espacios para compartir experiencias entre universidades y cuantificar el impacto de estas herramientas en el aprendizaje y enganche.
Seguimiento y espacios de diálogo, claves para instituciones educativas
Irving Hidrogo, director de Inteligencia Artificial Educativa del Tec, destacó la manera en la que es indispensable que las universidades den seguimiento a la implementación y uso de la IA en sus ecosistemas.
Por esta razón, el monitoreo de las experiencias de la facultad, así como, de las vivencias de los estudiantes son vitales para cuantificar. De esta forma, hacer mejoras que lleven a una evolución positiva del uso de la IA como parte del aula. Asimismo, promover y mantener espacios de diálogo común sobre dichas experiencias permite explorar y aprender desde diferentes iniciativas y acercamientos.
Revalorar las competencias de egresados
Por su parte, Abarca destacó cómo el panorama global se ha definido por una sensación de incertidumbre. Esto, ha forzado a las instituciones educativas a revalorar las competencias de sus egresados.
Siendo este el caso, la manera en la que preparar a los jóvenes para un entorno laboral que evoluciona de manera exponencial es imperativo para las universidades. De esta forma, la formación con herramientas de IA, desde una perspectiva relevante a sus disciplinas y bajo lineamientos éticos, puede ser una estrategia efectiva para combatir la incertidumbre.
Inteligencia híbrida potencializa impacto del aprendizaje autorregulado
Sanna Järvelä, directora del Laboratorio de Investigación LET en la Universidad de Oulu, destacó dentro de su ponencia el poder y singularidad del elemento humano a la par de las capacidades de aprendizaje y evolución de la IA.
Se pueden combinar el poder del aprendizaje autorregulado del humano a la par de la evolución exponencial de la IA. Dicha colaboración se vuelve crucial en el proceso de aprendizaje y re-skilling, dando paso a una inteligencia híbrida.

Diseño de IA omnisciente, omnipresente y omnibenevolente para el aula
Según Ogan, el diseño de inteligencia artificial en el aula actualmente puede sentirse como una fuerza con cualidades que sobrepasan a las humanas, siendo: omnisciente, omnipresente y omnibenevolente.
Por esta razón, explicó que tecnologías con diseños que requieren al elemento humano en su monitoreo o uso mantienen la necesidad del profesor. A su vez, alientan la cooperación entre alumnos.
Explorar nuevas herramientas de IA
Carlos Recordon, decano asociado académico de PrepaTec, motivó a los profesores a experimentar con la tecnología. Y enfatizó en la importancia de la interacción humana y la personalización en el aprendizaje.
Este proceso autodidáctico y exploratorio puede ahorrar tiempo en tareas administrativas, permitiéndoles enfocarse más en la conexión con sus alumnos y en la enseñanza efectiva, a la par de crear material dinámico enganchante.
Isaac López, líder nacional de Español y Literatura, Ciencias Sociales y Humanidades, sugiere que los profesores prueben herramientas como Gamma o Poe, plataformas intuitivas para presentar o crear bots informativos.
Guiar en uso ético de IA, preferible a su prohibición
Ivon Aida Cepeda, decana asociada de Facultad de la Escuela de Humanidades y Educación del Tec, sugiere adoptar un enfoque interdisciplinario que permita a los profesionales de diversas áreas colaborar y aprender unos de otros.
Por esta razón, se destacó la importancia de la reflexión ética en la educación. Esto, especialmente en el contexto de la tecnología y su impacto en la sociedad. A su vez, menciona que no sólo se trata de la ética relacionada con la tecnología, sino de promover una ética en todos los aspectos de la vida profesional.
Asimismo, se enfatiza la necesidad de que los profesionales sean conscientes de su responsabilidad social. Así como de saber que sus decisiones pueden afectar a la comunidad. Todo esto es fundamental para fortalecer la ética en cualquier rama profesional.