Hoy martes 2 de febrero se cumplen 170 años del natalicio del ilustre José Guadalupe Posada, cuya obra constituye un invaluable legado que nos enorgullece no solamente a los aguascalentenses, sino a los mexicanos en general, dado el reconocimiento alcanzado por el grabador a nivel internacional.
De acuerdo a datos divulgados por el Instituto Cultural de Aguascalientes (ICA) y el museo que lleva su nombre, la primera morada de Posada fue la finca marcada con los números 47 y 49 de la antigua calle de “Sayula”, nombrada posteriormente como de “Los Ángeles”. Actualmente la calle recibe el nombre de “José Guadalupe Posada”, en su honor, estando ubicada en pleno corazón del Barrio de San Marcos, en la capital de Aguascalientes.
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Los grabados de Posada han traspasado fronteras, llegando a países prácticamente de todos los continentes donde se le ha reconocido como el gran artista y hombre de su tiempo que fue.
Una de sus obras más importantes es indudablemente “La Calavera Garbancera”, que posteriormente quedó inmortalizada como “La Catrina” en el mural “Sueños de una Tarde de Domingo en la Alameda Central” de Diego Rivera.
De hecho, “La Catrina” es considerada como un símbolo de identidad nacional y en torno a ella se ha desarrollado toda una conmemoración en el marco del Día de Muertos, con la realización en el caso concreto de Aguascalientes del Festival de Calaveras, mientras en nuestro país se ha convertido en un punto de referencia de las tradiciones mexicanas que nos distinguen por el culto que reciben nuestros difuntos.
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No obstante lo anterior, y lo que se ha escrito y realizado en torno a la figura de Posada, es claro que su trabajo va más allá que las calaveras y que la misma Catrina, por lo que tenemos el compromiso de continuar difundiendo y honrando su legado.
En este sentido, es necesario resaltar que este 1 de febrero la Lotería Nacional conmemoró el 170 aniversario luctuoso de Posada colocando en los billetes del Sorteo Mayor No. 3834 la imagen de uno de los grabados más emblemáticos del aguascalentense: «Esta es de Don Quijote la primera, la sin par la gigante calavera», que proviene de la placa metálica de zinc montada sobre tacón de madera y que se encuentra en exhibición en forma permanente en el Museo Posada.
Además, es preciso subrayar que sobre Posada continúa realizándose investigación, puesto que hace unos días la maestra Patricia Guajardo reveló la posibilidad de que se haya encontrado una tercera fotografía del maestro (sólo se conocen dos), en el archivo de Francisco Antúnez Madrigal, cuyo libro «Notas para una Historia de la Imprenta en Aguascalientes» estaría presentándose próximamente.
A todo lo anterior, hay que agregar que este año se cumple el 50 Aniversario de la apertura del museo erigido en honor al aguascalentense y que está enclavado en el Barrio del Encino.
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