Continuando con lo que plantee en mi artículo pasado, y tratando de contestar a las preguntas que yo mismo me hice, me topé con la nueva lista de Forbes “The World’s Billionaires” (http://www.forbes.com/billionaires/list/) y comencé a analizarla.
Nota: según la publicación, calculan estas “riquezas netas” en su equivalente en USD, según las posiciones accionarias de estos personajes dentro de sus propias empresas, posesiones importantes (arte, bienes raíces, yates y aviones, etc.). Los números finales son, entonces, un reflejo del “valor” de sus inversiones, no del efectivo que poseen.
Grafiqué los primeros veinticinco resultados y me llamó la atención cómo los tres primeros están tan cerca de sí e, incluso, es conocido que entre ellos mismos negocian. Entre los primeros 25 suman activos por más de USD$ 1,031,200 millones y, de ellos, 18 son ciudadanos americanos. Además, sólo seis obtienen su riqueza de empresas relacionadas con tecnología.
Si sumamos las fortunas de los Walton (herederos de Sam Walton, fundador de Wal-Mart y Sam’s Club), vemos cómo superan a Gates, sumando más de USD$ 160,000 millones.
Observo también que el primer chino (con sede en Hong Kong para ser exactos), aparece hasta el puesto 17. Y no vemos ningún personaje del Medio Oriente dentro de los primeros 25. La edad promedio de estas 25 personas “más ricas” del mundo es de 67.4 años; los más jóvenes son los fundadores de Snapchat, con 24 y 25 años, y están empatados en el puesto 1,250 de la lista.
Sólo hay 197 mujeres en la lista (11 por ciento). De ellas, 46 son personas con menos de 40 años de edad, es decir, el 2.5 por ciento.
Los EE UU concentran a 29 por ciento de estos multimillonarios, seguido por China, Alemania, India y Rusia. El 65 por ciento de estas personas han hecho su riqueza por ellos mismos, el resto la han heredado (13 por ciento) o están haciendo crecer lo que recibieron (22 por ciento).
Analizar 1,826 puestos es una tarea tediosa, pero quiero apuntar algunos comentarios:
- Los americanos siguen jugando un papel predominante en la generación y acumulación de riqueza en el mundo y, según lo que vemos en la lista, concentran casi el 30 por ciento.
- La región Asia – Pacífico es la que sigue.
- La caída de los precios del petróleo influyó en la riqueza de algunos listados, pero no de la manera en que se pensaba. El dólar (USD) fuerte sí va a influenciar más significativamente e impulsará la riqueza de los americanos, a costa de un EUR débil.
- Sigo observando que los principales jugadores de esta lista son individuos muy hábiles en lo que hacen, y que han sabido mantenerse en esas posiciones debido a prácticas que, a mi parecer, se convierten en monopólicas. A pesar de todo, ¿quién está dispuesto a dejarle a la competencia lo que tanto trabajo cuesta? ¿cómo genero barreras de entrada y defiendo mi market share? Analicemos el caso de Microsoft, dudo mucho que hubiera registrado un crecimiento exponencial y podido borrar a Netscape del mapa sin tener esa posición predominante en las PCs; o, el caso de Apple, que controla un ecosistema cerrado, regido por sí mismo (¡cero competencia!) y con márgenes absurdamente altos. Ni hablar de la predominancia de Wal-Mart en el mercado del retail… y así podemos seguir con todos los de la lista.
Y, así llegamos de nuevo a la pregunta inicial, ¿Por qué Bill (Gates) tiene más dinero que Carlos (Slim)? Porque la cantidad de acciones que tiene Bill en su empresa Microsoft (y otras) valen más (valor = cantidad * precio) que las que Carlos tiene en América Móvil, Grupo Carso y anexas. La posición de Bill está diversificada globalmente y la de Carlos por industrias, pero muy ligadas a México. Si la estrategia de diversificación (en otros mercados, productos y servicios) de Carlos Slim paga frutos como él pretende y no sufre tanto por los cambios de regulación en México, podremos ver que de nuevo el sr. Slim toma la delantera.
¿Ya vieron la lista de este año? ¿Qué opinan sobre ella?