Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán está cada vez más cerca de Estados Unidos, a dónde hace unas semanas pidió ser extraditado. Sorpresivamente, este lunes fue trasladado a un penal de Ciudad Juárez, uno de los peores de México, que no destaca por las condiciones que se dan en sus cárceles.
El último reporte de la Comisión Nacional de Derechos Humanos sobre las prisiones mexicanas arroja datos alarmantes. Según este diagnóstico, hasta 73 cárceles están autogobernadas por los reos, el hacinamiento hace convivir a 30 presos en una celda diseñada para cuatro y los problemas de higiene y atención médica son deplorables.
En este panorama, destacan dos por sus malas condiciones. La que tiene el dudoso honor de ser la segunda peor cárcel mexicana es el Centro Federal de Readaptación Social número 11 de Sonora. ¿Y la peor? Efectivamente: el Centro Federal de Readaptación Social número 9 de ciudad Juárez, en Chihuahua, la nueva casa del Chapo.
Además de ser la número uno (en la lista de las peores prisiones del país), estos son los números más llamativos de la cárcel en la que vivirá el narco desde esta semana:
- Se encuentra a 30 kilómetros de la frontera con Estados Unidos.
- Obtuvo la calificación más baja (6,63 puntos sobre 10) de los 21 Ceferesos evaluados por la CNDH.
- Consta de cuatro módulos de alta seguridad.
- Tiene una capacidad para 848 personas.
- Sin embargo, en estos momentos hay un total de 1.012 internos entre sus muros.
- Según el gobernador de Chihuahua, César Duarte, el perímetro de la cárcel ha sido reforzado con 150 efectivos militares desde el traslado del Chapo.
- Cinco reos consiguieron fugarse del penal en 2014, y solo tres de ellos fueron recapturados.