El recorte de personal de Nissan en Aguascalientes traerá un efecto dominó que podría general la pérdida de por lo menos mil empleos en la industria automotriz en la entidad, manifestó el Colegio de Economistas.
La semana pasada se dio a conocer el despido de 300 trabajadores de la planta A-2 de la ensambladora japonesa, sin embargo, tras negociaciones, se acordó reducir el recorte a 200 empleados. Nissan, al igual que la industria automotriz en general, viene enfrentando desde hace meses una caída pronunciada en la producción y venta de vehículos ligeros, problemáticas que se han visto agravadas por la emergencia sanitaria por la COVID-19.
En el mes de mayo, la marca nipona registró un desplome anual del 96.6% en la producción y del 55.8% en la comercialización de vehículos ligeros.
«Estos [doscientos] empleos que están por perderse pudieran parecer no tan representativos dado la cantidad de trabajadores que laboran en este sector, que son alrededor de 40 mil, sin embargo, debe de haber sensibilidad hacia la importancia que representa el empleo para estas personas y sus familias», señaló Gil Gordillo, secretario de Comisiones del Colegio de Economistas de Aguascalientes.
No obstante, el especialista pone en relieve el efecto multiplicador que tiene Nissan sobre la entidad, pues al ser el gran imán y motor de la industria automotriz en el estado, una afectación a la compañía japonesa invariablemente se dejará sentir en el territorio hidrocálido. En este caso, la compleja situación que atraviesa impactará a la red de empresas que proveen y atienden a la trasnacional, lo cual podrá traducirse en más empleos perdidos. Días atrás, el presidente de la FTA, Alfredo González González estimó que las empresas proveedoras de Nissan despedirán a 200 trabajadores, lo que deja un total de 400 empleos eliminados.
«Esto puede empezar a aumentar paulatinamente mes con mes, hasta llegar a perderse más de mil empleos», refirió Gil Gordillo Mendoza. En este sentido, el economista señaló que dependerá del comportamiento de Nissan en el mercado interno y externo. Recordó que en el mes de marzo, la japonesa exportó 21 mil unidades a Estados Unidos, una caída pronunciada respecto a los 40 mil reportados en el mismo periodo de 2019. “Desde antes de la crisis pandémica ya se observaba una reducción en las exportaciones por el entorno macroeconómico a nivel global”.
Derivado de lo anterior, Gil Gordillo Mendoza resaltó la relevancia de elaborar estrategias con el Servicio Estatal de Empleo o a nivel federal para hallar la forma de colocar laboralmente al personal que acaba de perder su empleo, o llegar a un compromiso de volver a incorporarlos a la empresa una vez que se haya logrado una recuperación económica.